El lunes, el hallazgo de una gran cantidad de peces muertos en el Dique el Frontal sorprendió a turistas y habitantes de las Termas de Río Hondo.
El Secretario de Medio Ambiente de Tucumán, Alfredo Montalván, contó que ayer se había puesto en contacto con el director de medio ambiente de Santiago del Estero, Juan Carlos Targa, y que éste le había comunicado que luego de sobrevolar la zona en helicóptero junto a un Fiscal y personal de Gendarmería se determinó que ya no se divisaban peces muertos ni manchas de ningún tipo en el dique. Del mismo modo, según contó Montalván, Policía Lacustre de esa provincia había informado que la situación se estaba normalizando.
Ante las quejas de algunos vecinos de Las Termas, que culparon por la muerte de los peces a industrias de nuestra provincia por arrojar desechos contaminantes al río, Montalván dijo: "No se puede atribuir con liviandad la aparición de los peces muertos a las industrias tucumanas, porque éstas no están funcionando. Ya terminó la zafra citrícola y azucarera". El funcionario indicó que la muerte de los animales se explicaría por las crecidas en el Río Salí. "Éstas movieron el fondo, lo que remueve los sedimentos con nutrientes. Esto provocó el crecimiento de algas que al descomponerse causaron una disminución en el oxígeno del agua", explicó. "Es una teoría. Creemos que esa sería la causa", añadió.
Además, Montalván recordó que el Comité de la Cuenca, integrado por representantes de Córdoba, Santiago del Estero, Tucumán y la Nación, realizó un monitoreo los días 17, 18 y 19 de diciembre. "Los parámetros eran normales, no había ingresado nada desde Tucumán", advirtió.
Montalván dijo que el fenómeno sucede todos los años, con mayor o menor magnitud, y que sólo ocurre con las primeras crecidas. "Esperemos que no vuelva a ocurrir. Vamos a seguir trabajando de cerca. De todos modos, hay muchos ojos vigilando el dique, lo que me parece muy bien", afirmó.
El hallazgo también fue publicado en la edición de ayer del diario santiagueño El Liberal. "El escenario dantesco del impacto ambiental sobre el embalse Río Hondo y el río Dulce brinda su peor impresión en turistas que visitan este centro de atracción turística. Un millar de peces flotan y algunos agonizan en forma de espiral en los piletones del dique Frontal", escribió el periodista de ese medio.
Citado por El Liberal, Julio Cardozo, vecino del barrio Agua Santa, dijo que había ingresado a las aguas del río Dulce, en la zona conocida como el balneario municipal. Manifestó a ese diario que ingresó al agua y no pudo estar ni diez minutos por el olor nauseabundo. "Me dieron ganas de vomitar cuando estuve en el agua, quería refrescarme un poco pero fue imposible", expresó.
No es la primera vez
No es la primera vez que se encuentran cientos de peces muertos. Hace una semana aparecieron en distintos tramos del lago de Las Termas de Río Hondo. Según informó la Policía y la Defensoría del Pueblo de Santiago del Estero, la causa habría sido la utilización de explosivos para la pesca clandestina.
Los peces muertos fueron encontrados por personal de la Policía Lacustre. También podía divisarse en el agua una mancha densa y aceitosa. La densa mancha de color azulado y la muerte de cientos de peces, había sido provocada por explosivos que utilizan pescadores furtivos en la pesca clandestina, señaló entonces el informe policial. Sin embargo, no se descartó que otros residuos tóxicos mineros, arrojados a la cuenca Salí-Dulce, también provoquen la muerte de las especies de sábalos, dorados y bagres.
Hace una semana los pobladores de la villa turística de Las Termas también a denunciar que la contaminación es provocada por "los desechos industriales que arrojan empresas tucumanas" a la cuenca de los ríos Salí (Tucumán) y Dulce (Santiago del Estero).
Estudios anteriores, determinaron que los desechos industriales y minerales estimulan la acumulación de algas y cuando entran en descomposición, absorben el oxígeno indispensable para la supervivencia de la fauna ictícola.
Por otra parte, ayer trascendió que lugareños habían recogido los peces muertos para comercializarlos. Sin embargo, esta versión no pudo ser confirmada.
Consultado por EL SIGLO, el comisario Luis Marcelo Godoy, a cargo de la división de Policía Ecológica, afirmó que no se habían recibido denuncias al respecto.
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