A partir de hoy circularán por las calles de este balneario ocho "guardianes del agua", que multarán a quienes rieguen el jardín o laven su auto entre las 11 y las 21. La medida fue tomada a las apuradas por el gobierno municipal ante los primeros casos de baja presión y corte del suministro, que afectaron en estos días sobre todo a la zona de Martín Pescador, un barrio de casas de alquiler en la que cientos de turistas están pasando sus vacaciones.
El intendente interino, Rafael De Vito, desempolvó una ordenanza de riego de 1994 que, según el presidente de la Cooperativa de Agua y Luz de Pinamar (CALP), Alberto Otero, "nunca se había cumplido hasta ahora".
Ayer al mediodía, cuando el calor agobiaba a los veraneantes, De Vito informó en una conferencia de prensa que los inspectores estarán en la calle a partir de hoy. "El problema de la falta de agua es grave. También pasa en Chascomús y Lezama", dijo.
La primera multa será de 120 pesos y se duplicará cada vez que se detecte alguna infracción en el mismo domicilio. Sea un inquilino de temporada o el mismo dueño a quien se encuentre regando el jardín fuera de horario se labrará un acta que se enviará luego al propietario. "Si la pagará el dueño o el inquilino, a través de las inmobiliarias, es un problema de ellos. Nosotros queremos advertir sobre el problema y hacer cumplir la norma", dijo a LA NACION el director de fiscalización de la municipalidad, Daniel Jouffré.
Otero advirtió que aún no falta el agua en Pinamar sino que hay problemas de presión en las zonas altas, como Martín Pescador. "Pero si se mantiene el desperdicio de agua en el riego y la sequía actual, podría faltar el agua en Pinamar a mediados de febrero", dijo, e informó que anteayer se recibieron 25 reclamos por baja presión del agua.
"No tengo conocimiento de cortes", afirmó y sostuvo que se llegó a esta situación porque durante 2008 llovió "excesivamente poco".