Según el director designado por la república de Paraguay en la represa, Silvestre Araujo, como también Carlos Cardozo, funcionario en la localidad de Ayolas, aseguraron que nunca vieron un descenso tan grande de las aguas como el que se vive.
También señalaron que se está produciendo entre 36 y 38 gigawatts de energía eléctrica por hora, cuando en condiciones normales, la planta es capaz de producir 40 gigawatts por hora.
El pronunciado descenso del río Paraná comenzó a afectar a la represa Yacyretá, y debido al fenómeno, la central hidroeléctrica paraguayo/argentina está produciendo un 10% menos de electricidad.
Según una publicación del diario ABC del vecino país, la EBY comenzó a tener problemas con la bajante del río Paraná, sobre todo porque este curso fluvial es uno de los más caudalosos y grandes de Sudamérica, y aseguran que experimentó un descenso de aproximadamente 5 metros.
Así los directivos sostienen que la usina, de una producción regular de 40 gigawatts, en condiciones normales, bajó a 36 y 38 gigawatts/hora. En el nivel óptimo se registra con una afluencia de agua de 15.000 metros cúbicos por segundo.
De todas formas trataron de llevar tranquilidad al afirmar que a pesar de que el problema es pronunciado, la EBY todavía no sufre un impacto muy grave del mismo.
No obstante manifestaron que Argentina, copropietaria con Paraguay de la hidroeléctrica, es la principal afectada, porque recordó que la firma vende casi la totalidad de su producción a la Argentina, el año pasado al 31 de diciembre, 92,2%.