Mientras el gobierno nacional acusa a la oposición de querer sumar votos con la crisis del campo acentuada por la sequía, hubo un guiño del ministro del Interior Florencio Randazzo hacia los productores agropecuarios: "Si al campo le va mal, le va mal a la Argentina".
"Este es el momento para ayudar a los productores, no para sacar un rédito electoral. La oposición ha politizado la protesta rural. Se cumplió claramente lo que veníamos diciendo", dijo Randazzo y destacó, como punto clave, el acto del viernes en la Ruta 2, en el que -junto a dirigentes rurales- participaron líderes de la oposición política, como Elisa Carrió, titular de Coalición Cívica, el diputado porteño Jorge Macri, y los diputados justicialistas disidentes, Felipe Solá y Francisco De Narváez.
"Los Kirchner no se van a olvidar de haber enfrentado al campo", dijo en aquel acto el titular de la Federación Agraria de Entre Ríos, Alfredo De Angeli, entre el aplauso de los políticos opositores.
Randazzo afirmó, además, que estos dirigentes no representan los verdaderos intereses del sector agropecuario y que están ahí sólo porque porque muchos de ellos van a ser candidatos a las elecciones legislativas del 25 octubre, donde se renovará la mitad de la Cámara de Diputados y un tercio del Senado.
La respuesta oficial entonces fue un acercamiento al sector agropecuario. "Queremos ayudar a los productores, porque consideramos que si al campo le va mal, le va mal a la Argentina", dijo ayer Randazzo.
El gobernador de Buenos Aires Daniel Scioli había dicho algo parecido el jueves: "esta vez el campo tiene razón", sostuvo en una recorrida por General Belgrano, justificando los pedidos de los ruralistas por el impacto de la sequía.
Randazzo respondió a las duras críticas de De Angeli: "No hay intolerancia en el gobierno. Sí, la tienen algunos dirigentes del sector agropecuario, que hacen declaraciones disparatadas como que al gobierno sólo le faltaban las armas. Quieren diálogo y dicen que a este gobierno le faltan las armas. No se entiende".
"Me parece que no hay un interés por contribuir a los productores a resolver el problema. ¿Qué culpa tiene el gobierno de la sequía?", señaló ayer Randazzo.
"Hay que saber que muchas veces el Gobierno no puede satisfacer todas las necesidades de cada uno de los sectores, ya sea del campo, de la industria, o el caso de los docentes, trabajadores de la construcción o de aquellos que no tienen un empleo", enumeró el ministro.