Hasta el 12 de febrero no se resolvería el pedido de declarar la emergencia y/o desastre agropecuario en Tres Arroyos. Se trata de la fecha estimativa para la próxima reunión de la comisión provincial que tiene a su cargo la evaluación de las solicitudes; tal fue la respuesta ante una consulta realizada desde ámbitos municipales, de acuerdo a lo que indicaron fuentes seguras a este diario.
En forma reciente, la comisión resolvió declarar el estado de emergencia y/o desastre agropecuario, por el término de seis meses a partir del 1º de enero de este año, en algunos partidos bonaerenses. En tanto, se dio entrada a las solicitudes presentadas por los partidos de Ayacucho, Cañuelas, Necochea, Rauch, San Miguel del Monte, Adolfo Gonzales Chaves y Tres Arroyos, que serán motivo de análisis en el próximo encuentro.
Nuestro distrito cuenta con una comisión de emergencia agropecuaria, que el 18 de diciembre pasado y luego de observar informes técnicos sobre el impacto de la falta de precipitaciones en los cultivos y en las prácticas ganaderas, decidió realizar el acta con la correspondiente solicitud. Con tal finalidad, se adjuntaron las estadísticas sobre lluvias, registros promedio, indicadores de 2008 y otros datos de relevancia sobre los alcances de la sequía en el distrito.
Si la reducción en los rindes es de entre 50 y 80 por ciento, se obtiene la emergencia. En tanto, los daños de mayor gravedad dan lugar al otorgamiento del desastre. Desde Tres Arroyos se pidió por ambas alternativas, pero todo indica que la comisión finalmente avalaría -una vez que retome los encuentros- la emergencia, en forma parcial o para todo el territorio del partido.
Si se establece formalmente una resolución favorable, los responsables de los establecimientos rurales comprendidos deben presentar una declaración jurada acerca de los cultivos que sembraron y las pérdidas por rinde debido a la sequía. En primer término, la documentación es recibida por la comisión local y luego se eleva a la provincia, desde donde se envía un certificado -en caso de dar el visto bueno- que establece que el productor está en estado de emergencia. El certificado es clave para concretar los trámites que permiten obtener los beneficios.
Una prorroga
Además de las demoras incomprensibles frente a los problemas que padece el campo, hay inquietudes coincidentes en distritos de Buenos Aires sobre las limitaciones y pocos aportes que en la práctica ofrece este sistema.
La emergencia consiste en la prórroga de obligaciones impositivas y crediticias por un período determinado. Transcurrido el plazo, el productor debe asumir los impuestos y cuotas prorrogadas, así como se encuentra ante los nuevos vencimientos; en estas condiciones, las dificultades reaparecen meses más tarde.
Del mismo modo, se objeta que el productor que accede al certificado deja de considerado sujeto de crédito. Luego de una campaña con malos resultados, requiere de financiamiento para volver a sembrar, adquirir gasoil y otros insumos; sin embargo, las entidades bancarias no le otorgan fondos para su recuperación, lo que implica un obstáculo muy importante. "Es lo contrario a lo que debiera ser", resumió a LA VOZ DEL PUEBLO un profesional de nuestro medio que conoce al detalle la metodología que se aplica en esta legislación.
En cambio, la ayuda es concreta cuando un sector es considerado en estado de desastre, marco en el cual se condonan las obligaciones que debía cumplir el agricultor o ganadero afectado durante el plazo definido por la comisión.
Poco interés
Los pronunciamientos en favor de modificar el régimen de emergencia han llegado a los funcionarios provinciales. Un ejemplo claro se registró en la reunión de la comisión local, el mes pasado, que contó con la asistencia de Horacio Masciotti, por entonces director de Economía Rural de la Subsecretaría de Asuntos Agrarios (actualmente es coordinador del Plan de Desarrollo del Sudoeste). Los productores expresaron que se debe adecuar el sistema para que los beneficios sean palpables y el funcionario admitió que los pedidos en este sentido son reiterados.
En la campaña anterior, una parte de nuestro partido fue declarado en emergencia. Sólo se presentó un interesado para avanzar con las tramitaciones en la Secretaría de Producción. En 2006/2007 se habían sumado más inscriptos, pero cuando advirtieron que dejaban de ser sujetos de crédito buscaron quedar al margen de la listado de beneficiados.
Atendiendo esta realidad, el acto suscripta por miembros de la comisión tresarroyense hace una referencia específica para que se generen "a través del Banco de la Provincia, préstamos para capital de trabajo en condiciones promocionales para todos los productores".
El impacto en el campo del distrito
La comisión local se reunió el 18 de diciembre y resolvió solicitar la emergencia y/o desastre agropecuario por sequía. El acta fue suscripta por Héctor Poggi, a cargo de la Dirección Vial; Guillermo Salim, secretario de Producción; Mariano Astiz, presidente de la Sociedad Rural; Ricardo Ravella, presidente del Concejo Deliberante; Hugo Carracedo y José Bracco, de Federación Agraria Argentina; y Julio Domingo Yagüez, de la Chacra Experimental Integrada Barrow.
Tomó en consideración la información obtenida de productores y trabajos realizados por la Chacra Barrow que muestran datos históricos hasta la actualidad, que confirman los preocupantes daños provocados por la sequía.
A partir de estos parámetros, advierte que "la falta de lluvias en todo el ciclo de los cultivos se acentuó en el momento crítico del llenado del grano, lo que produjo que los rindes obtenidos en la cosecha fina se ubiquen muy por debajo de los promedios históricos de todo el partido de Tres Arroyos".
También indica que "las altas temperaturas y vientos registrados durante el período de llenado de grano, además de disminuir el rendimiento de los cultivos, afectó la calidad de los granos obtenidos".
Del mismo modo, pone de manifiesto que "la falta de precipitaciones y reserva de humedad en el suelo producen un retraso considerable en la implantación de los cultivos de cosecha gruesa".
Otro punto que tiene gran incidencia es que "las condiciones climáticas que afectaron a los cultivos de cosecha fina, también afectaron de la misma forma la disponibilidad forrajera, impactando en la producción ganadera del partido, disminuyendo los índices de preñez". Puntualiza finalmente que "la producción apícola se ve afectada directamente al bajar significativamente los rendimientos de los apiarios".
Tras solicitar la declaración por parte de la comisión provincial, le solicita especialmente a sus integrantes que realicen las gestiones que estimen pertinentes a fin de generar "a través del Banco de la Provincia, préstamos para capital de trabajo en condiciones promocionales para todos los productores, ya sea que presenten o no la solicitud de emergencia o desastre, considerando lo establecido en el artículo 10 inciso 1 de la Ley 10.390".
Las sequías históricas
La ingeniera agrónoma Marta Reneé Borda, de la Chacra Experimental Integrada Barrow, dio a conocer los períodos secos desde enero de 1938 a diciembre de 2008. La actual sequía se inició en mayo del año pasado
Marta Reneé Borda, ingeniera agrónoma que se desempeña en el área de Agrometeorología de la Chacra Experimental Integrada Barrow, concretó un trabajo sobre los períodos secos a partir de 1938. "La sequía agrícola, según la Organización Meteorológica Mundial, ocurre cuando la cantidad de precipitación, su distribución, las reservas de agua en el suelo y las pérdidas producidas por la evapotranspiración se combinan para causar una disminución considerable de los rendimientos del cultivo y el ganado", explicó.
Por lo tanto, dijo que "la sequía es un fenómeno que está dado por la combinación de condiciones meteorológicas, hidrológicas, agrícolas y también por el efecto de la actividad humana. El análisis de las sequías se realiza a través de los índices climáticos, que reunen en una sola variable, los efectos combinados de más de un parámetro".
Dentro de este tipo de indicadores "se halla el índice de anomalía de humedad Z, de Palmer. En este modelo se analiza la anomalía de humedad del suelo, y aplicado mensualmente, es una herramienta práctica para evaluar, por ejemplo, las condiciones ambientales en el período de desarrollo de un cultivo. Sin embargo, uno de los usos más comunes es utilizarlo para identificar los períodos secos y húmedos de una zona".
Borda señaló que "en esta oportunidad, utilizando los archivos meteorológicos de la Chacra Experimental Integrada Barrow se determinaron los períodos secos desde enero de 1938 a diciembre de 2008. El trabajo consistió en realizar un balance hidrológico, obteniéndose un índice de anomalía de humedad Z y un índice de sequía mensual". Y agregó que "posteriormente, con la marcha temporal de los índices de sequía mensuales, se determinó la duración y la gravedad de la sequía" (Ver cuadro adjunto).
La duración de la sequía está dada en meses y en gravedad. Se diferencia en incipiente (I), débil (D), moderada (M), severa (S) y extrema (E). A modo de ejemplo, sostuvo que la sequía de 1988/1989 comenzó en julio de 1988 y finalizó en agosto de 1989, durante estos catorce meses, pasó por todas las etapas, de incipiente hasta una sequía extrema, que es la más grave.
Según destacó, en los últimos años estos períodos secos tan prolongados no habían vuelto a aparecer. Las últimas sequías más extensas fueron las de 1988/1989 y la de 1998/1999.
"Es de esperar que la sequía que se está presentando en este momento, y que se inició en el 2008, no se prolongue en el tiempo", afirmó.
En los 70 años analizados, hubo 272 meses con sequía y, un 30 por ciento fue sequía de tipo severa a extrema.
Períodos secos
Comienza Finaliza Duración en meses
Mes Año Mes Año I D M S E Total
Febrero 1938 Setiembre 1939 0 2 6 6 6 20
Abril 1940 Abril 1940 0 1 0 0 0 1
Diciembre 1941 Julio 1942 0 3 3 0 1 7
Diciembre 1942 Setiembre 1943 0 2 3 0 5 10
Febrero 1945 Diciembre 1945 1 3 2 2 3 11
Febrero 1948 Febrero 1948 0 1 0 0 0 1
Agosto 1949 Julio 1952 3 3 15 4 8 33
Agosto 1953 Diciembre 1953 1 2 2 0 0 5
Diciembre 1955 Febrero 1956 1 0 1 1 0 3
Diciembre 1956 Diciembre 1956 1 0 0 0 0 1
Marzo 1957 Octubre 1957 1 2 2 0 0 5
Febrero 1958 Agosto 1958 6 1 0 0 0 7
Enero 1959 Enero 1960 1 2 7 1 2 1 3
Diciembre 1960 Diciembre 1960 0 1 0 0 0 1
Mayo 1961 Agosto 1963 3 4 3 5 1 1 2 6
Marzo 1965 Octubre 1966 3 8 5 1 2 1 9
Agosto 1967 Setiembre 1967 1 1 0 0 0 2
Enero 1968 Enero 1969 2 1 3 4 2 1 2
Octubre 1970 Julio 1971 3 2 1 2 0 8
Marzo 1972 Agosto 1972 0 1 5 0 0 6
Abril 1973 Diciembre 1973 1 4 2 2 0 9
Octubre 1974 Noviembre 1974 2 0 0 0 0 2
Setiembre 1975 Enero 1976 1 1 2 0 0 4
Junio 1988 Agosto 1989 2 4 1 5 3 1 5
Abril 1991 Abril 1991 1 0 0 0 0 1
Julio 1995 Enero 1996 2 4 1 0 0 7
Setiembre 1996 Noviembre 1996 1 2 0 0 0 3
Diciembre 1998 Noviembre 1999 1 7 2 0 2 1 2
Julio 2003 Setiembre 2003 2 1 0 0 0 3
Marzo 2004 Julio 2004 4 0 0 0 0 4
Diciembre 2005 Diciembre 2005 1 0 0 0 0 1
Mayo 2006 Setiembre 2006 1 2 2 0 0 5
Noviembre 2006 Noviembre 2006 0 1 0 0 0 1
Enero 2007 Enero 2007 1 0 0 0 0 1
Julio 2007 Agosto 2007 1 1 0 0 0 2
Diciembre 2007 Febrero 2008 0 1 1 1 0 3
Mayo 2008 Diciembre 2008 3 2 1 0 2 8
Total de meses 51 70 70 34 47 272
I: incipiente; D:débil; M: moderada; S: severa; E: extrema
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