La falta de agua, una pesadilla que registra sobrados antecedentes en los veranos de la región, volvió a golpear ayer en medio del agobiante calor. Hubo quejas en distintos sectores, pero la que más se hizo notar fue la de un grupo de vecinos que cortó la avenida 60 a la altura de 127.
Tras explicar que de sus canillas “no sale una mísera gota”, los vecinos le pidieron a la municipalidad de Berisso y a la empresa Aguas Bonaerenses (ABSA) que extiendan la red de agua corriente hacia el sector comprendido por las calles 65 a 60, desde 130 a 140, de Villa Argüello.
Roxana, una de las tantas mujeres que participaron de la protesta que se realizó en horas de la mañana, dijo a Hoy que al no tener el servicio tienen que arreglárselas como pueden. Entre otras cosas, acumulan el líquido en recipientes, pero se les termina rápidamente en virtud del intenso calor.
Los vecinos están cansados de caminar varias cuadras en busca del vital elemento que luego tienen que administrar para beber, cocinar, bañarse y realizar el resto de las tareas cotidianas.
El corte de calle recién se levantó cerca del mediodía cuando, según indicaron, lograron el compromiso de la Comuna y de la empresa para iniciar las obras que demandan.
Bety, una vecina de 65 entre 131 y 132, contó que el agua comenzó a faltar en diciembre, y coincidió en que el panorama comenzará a mejorar cuando los caños de la red de agua corriente lleguen a ese barrio que, por ahora, no cuenta con el abastecimiento de aquella compañía.
La protesta convocó a un centenar de personas y, como siempre ocurre en estos casos, complicó la circulación vehicular.

En La Plata
Varios hogares de nuestra ciudad no permanecieron ajenos a los problemas que se convirtieron en una de las pesadillas del verano. Por el contrario, en Las Quintas -para ser precisos en el sector delimitado por las calles 137 a 143, desde 33 hasta 528- debieron soportar otra jornada sin una gota. María, una de las vecinas, explicó: “No tuvimos ni para lavar un tomate, por lo que otra vez terminanos comiendo fiambre”.
En este caso, sí son clientes de ABSA y reclaman que la empresa brinde el servicio que corresponde “o que deje de enviar las facturas que aquí pagamos religiosamente”.