En señal al campo y en respuesta a la sequía que afecta a buena parte del país, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunció ayer que firmó un decreto de emergencia agropecuaria nacional. La medida implica el diferimiento por un año del pago del impuesto a las Ganancias, a los Bienes Personales y a la Renta Mínima presunta.
La resolución oficial no alcanza, por ahora, a la provincia de Córdoba, cuya situación comenzará a ser analizada el viernes por la comisión provincial de emergencia agropecuaria. “La última información disponible, que hemos analizado con la Mesa de Enlace provincial, da las bases para asegurar que Córdoba no tiene la misma situación que las provincias vecinas, pero estamos actuando con el ‘tanque de reserva’; más allá de que existen zonas altamente comprometidas”, explicó el ministro de Agricultura, Carlos Gutiérrez, al término de una reunión mantenida con los integrantes de la Mesa de Enlace provincial.
“Hay zonas comprometidas que demandan un análisis exhaustivo de sus condiciones; por eso nos vamos a reunir el viernes”, indicó Delfor Maldonado, presidente de Confederaciones Rurales de la Tercera Zona (Cartez). De acuerdo con la información suministrada por las delegaciones locales del Ministerio de Agricultura, los bolsones de sequía están ubicados en el noreste de la provincia y en el sur. En el resto, el escenario fue calificada por Gutiérrez como de “sequía moderada”.
A partir de la evaluación que realice la comisión, la Provincia no dudará en decretar la emergencia agropecuaria en las zonas que así lo ameriten, según indicó el ministro.
Como parte de la ayuda por sequía, la Provincia recibió de la Nación 22 millones de pesos que serán distribuidos entre 1.800 productores trigueros. “Hemos terminado el trámite burocrático que ya está en el Tribunal de Cuentas, al que le hemos pedido que lo resuelva a la brevedad. Una vez que nos autorice el pago, se depositará la ayuda en las cuentas de los productores”, precisó Gutiérrez.

Anuncio nacional. Mientras transcurría la reunión entre los funcionarios del Ministerio de Agricultura y los representantes de la Mesa de Enlace provincial, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunciaba en Buenos Aires el decreto 33, a través del cual declara en emergencia a las provincias que ya habían cumplimentado el trámite provincial y dispone prórrogas fiscales para los productores alcanzados por la medida.
Los beneficios comprenden el diferimiento por un año del pago de los impuestos a las Ganancias, a la Ganancia Mínima Presunta y a los Bienes Personales, tanto en declaraciones juradas como en saldos de presentaciones para el período fiscal comprendido entre el 1° de febrero y el 31 de julio de 2009.
“Es un gran esfuerzo que hacen todos los argentinos. No hay otro sector que tenga una ayuda similar. Queremos hacer este esfuerzo para ayudar a los sectores afectados. Pero reclamamos de todos una gran dosis de patriotismo”, sostuvo la Presidenta.
Los trámites más avanzados son los de las provincias de Entre Ríos, Chaco, Santiago del Estero, Corrientes, Santa Fe, La Pampa, Chubut, Río Negro, Neuquén, Salta y San Juan, que ya declararon sus respectivas emergencias.
Chaco, Santa Fe y La Pampa tienen procesos de declaración de emergencia que amplían los originales y en los últimos días ingresaron a la Comisión pedidos de Corrientes (por sequía) y Salta (por exceso de precipitaciones, que afecta a la apicultura y la producción de maní y cebolla). Hoy, la Comisión tratará declaraciones de emergencia de Entre Ríos, Chaco, Santiago del Estero, Chubut, San Juan y Corrientes.
A pesar del anuncio de ayer, del cual aún no se conoce el texto del decreto, el Gobierno demoró largamente la declaración de la emergencia agropecuaria, que normalmente se hace por resolución ministerial. Desde junio de 2008 no autorizaba ninguna, pese a que la Comisión de Emergencia Agropecuaria envió a la firma de los ministros Fernández (Economía) y Randazzo (Interior) 18 expedientes que pedían homologar emergencias declaradas por las provincias en varios distritos.
Luego de los anuncios, la ministra de Producción, Débora Giorgi, el secretario de Agricultura, Carlos Cheppi, y Ricardo Echegaray (Afip), explicaron los anuncios. Cheppi precisó que la “territorialidad” de la emergencia estará dada por las declaraciones de emergencia provinciales, al tiempo que Giorgi aclaró que el Gobierno no piensa reducir las retenciones.