Un depósito de grúas acusado de arrojar líquidos peligrosos en desagües cloacales y en la vía pública sigue funcionando pese a que fue clausurado en diciembredel año pasado, según informaron fuentes de la Fiscalía General N° 2 de la Ciudad, que llegaron al lugar esta semana para constatar nuevas denuncias de los vecinos. El predio está ubicado entre las calles Parker, Salvadores, California y Carlos Melo, en La Boca.
"Se violó la clausura administrativa, que fue dispuesta por la Agencia de Control Ambiental y ratificada por un controlador de faltas especiales, y la judicial, que también fue ratificada en su momento por el juez Ladislao Endre", aseguraron las fuentes.
Además, hay sospechas de que estaban por rellenar las cámaras cloacales con cemento. "Tenían contratada una empresa de cemento", dijo una funcionaria que conoce los detalles de la causa. "Eso -explicó- podría dar lugar a una denuncia por ocultamiento de prueba".
Mientras tanto, la Justicia porteña espera los resultados de las pericias tomadas en diciembre para definir si avanza con una denuncia penal por contaminación contra los dueños del predio, donde se volvió a colocar una consigna policial.
La causa se inició gracias al aporte de un vecino, que aportó fotos y documentación. Luego, se sumaron otros vecinos, que ya declararon en la Fiscalía General Nº 2. Los líquidos que se encontraron son solventes e hidrocarburos utilizados para limpiar grúas y autoelevadores. Además de llenar cámaras cloacales de cuatro metros de profundidad, se comprobó que se retiraban tanques con grasas pesadas y aceites hidráulicos sin las medidas de seguridad, por lo que se inició una causa por el artículo 54 del Código Contravencional.
|
|
|