Para la directora de la Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dianama), Alicia Torres, la sequía dejará el país desolado desde el punto de vista ambiental. También advirtió que las lluvias de los últimos días podrían erosionar aún más el suelo si estas son demasiado copiosas, ya que la mayor parte de la vegetación se encuentra en la superficie. Con respecto a la planta de Botnia, Torres dijo que ésta no contamina y expresó que los constantes monitoreos confirman el estudio de impacto ambiental realizado antes de su apertura. Agregó que en el río Uruguay hay espacio para otras papeleras dependiendo del proyecto ambiental que éstas presenten al gobierno.

-¿Cómo caen estas lluvias a un ecosistema castigado por la falta de agua desde hace seis meses?

-Cuando existen perturbaciones fuertes a los ecosistemas se dice que éstos sufren un estrés. En este caso hay un estrés hídrico en las pasturas naturales del Uruguay. Se trata de zonas húmedas, que están adaptadas para crecer y desarrollarse con agua permanente. Con la sequía el agua permanente se evaporó. Estas lluvias alivian ese estrés que estas zonas estaban sufriendo por déficit hídrico.

-¿Cuál es su opinión acerca del daño ambiental provocado por la seca?

-Puede haber un efecto más duradero con aquellas especies que sobrevivirán a este estrés. Si ahora retoman las lluvias y si se da una distribución homogéneas de las mismas, puede ser que la memoria de las semillas que quedan en el suelo, pueda recuperar las características de las pasturas.

-En algún momento usted dijo que la seca está dejando el país desolado.

-Es que muchas veces hay transformaciones en los ecosistemas que no son reversibles. Depende del tiempo en que dure ese estrés. Otra consecuencia que pueden tener estas lluvias, es que el suelo está desnudo porque se secó la vegetación. Entonces viene una lluvia muy rápida, con mucha energía en suelos con determinada pendiente, y genera un efecto un poco más acelerado de la erosión de los suelos.

-La sequía fue de tal magnitud que obligó a las autoridades del Ministerio de Medio Ambiente a impulsar medidas que generan impactos ambientales como ocurrió en el caso de la Laguna Negra, donde se permitió regar cultivos a través de un drenaje de la misma. ¿Se estaba ante una situación extrema?

-Sí. Pero la Laguna Negra viene perdiendo agua desde hace tiempo y no sólo por el Canal Andreoni que se edificó hace años.

-Fue construido por la dictadura buscando infructuosamente secar los bañados de la zona.

-Desde el punto de vista ambiental, los bañados de Rocha cumplían un rol en el ambiente de actuar como esponjas y retener la humedad. Cuando se los seca y se los conduce por un solo canal, generan todos los problemas y efectos que tuvo en la playa de La Coronilla. Con las obras que comenzarán ahora de regularización hídrica se revertirá el proceso. Las aguas, que circulan por el Canal Andreoni, serán conducidas nuevamente a su sistema natural de desagües por la Laguna Merín. Con el fenómeno de sequía, la Laguna Negra no tiene aportes de agua. Esta es un espejo de agua muy amplio pero de poca profundidad. Entonces allí el agua se evapora más rápido.

-Pese a ello la Dinama autorizó la extracción de agua de la Laguna Negra para regar cultivos de arroz.

-Fue por un período acotado. En realidad esa agua normalmente iba hacia los cultivos pero como había seca esta no podía pasar el terraplén. El déficit de agua de la Laguna Negra no es debido a ello, sino a la falta de aportes del elemento y la elevada evaporación.

-¿La sequía, que afectó el campo, provocó una pérdida de biodiversidad en las praderas uruguayas?

-Sí. Ocurrieron transformaciones del medio ambiente. Habrá que examinar en qué grado estas son reversibles si retorna el agua y en qué grado son más duraderas.

-Días atrás, los vecinos de Gualeguaychú se quejaron de malos olores provenientes de la planta de Botnia. ¿La Dinama realizó un monitoreo de la planta en ese momento?

-Sí. Nosotros siempre realizamos relevamientos en forma permanente. En este caso hubo una falla en una junta de una de las bombas tras unas tareas de mantenimiento. Los gases olorosos no afectan la salud aunque generan molestias.

-Sin embargo, autoridades y pobladores de Gualeguaychú señalaron que sufrieron dolores de garganta por las emanaciones de la planta.

-Eso corre por cuenta de ellos.

-¿La planta de Botnia contamina o no al río Uruguay?

-El proceso está bajo control. Hasta ahora los resultados de los exámenes confirman lo que nosotros previmos en el estudio de impacto y que las condiciones ambientales en que se desempeña el emprendimiento garantiza que funcione en manera armónica con su entorno. Mientras esté dentro de ese marco va a funcionar sin generar afectación a la calidad del aire, agua y entorno.

-¿Qué opina de la movilización de los activistas que ya llevan dos años de corte del puente en Fray Bentos? Es una medida que afecta al país.

-Sí. Como ciudadana siento eso. Pero nosotros trabajamos de manera colectiva con la gente de Fray Bentos donde tenemos una comisión de seguimiento. Hay ámbitos para tratar los temas de manera civilizada. Ojalá esta situación se pueda revertir y poder seguir trabajando junto con los técnicos argentinos como en 2005, cuando monitoreábamos la calidad del río Uruguay.

-¿Podría instalarse otra planta de celulosa en el río Uruguay?

-¿Hay espacios en Uruguay para que hayan más frigoríficos?

-Hay más cabezas de ganado que personas en el país.

-Ese frigorífico hay que ponerlo en algún lugar y generará afectación por olores. Lugar para poner una planta en Uruguay todavía hay, porque tenemos mucho terreno para actividades industriales.

-Me refería a la posibilidad de instalar una planta similar a la de Botnia en el río Uruguay.

-Sí. Depende de dónde se coloque. Desde el punto de vista ambiental, depende qué se pone y cuál es el ambiente que lo recibe.

Tambos sin planificación
-Estudios de Conaprole señalan que las rajaduras de los suelos generadas por la sequía y la capa permeable existente en Florida y al Norte de San José favorecía la contaminación provocada por los tambos. ¿Qué opina la Dinama?

-Siempre que haya menos agua en los pozos, es menor la capacidad de diluir los efluentes. El tambo utiliza mucha agua. Y si ésta no es dispuesta en un lugar adecuado, puede generar contaminación de la napa donde a la vez toman el agua.

-Muchos tambos tienen sus desagües muy cerca de los pozos.

-Muchas veces no hay una planificación global del predio. Y se siguen utilizando pozos de épocas donde el tambo era mucho menos desarrollado, tenía otro sistema de ordeñe y menor número de vacas.

PerfiL
Nombre: Alicia Torres
Nació: Montevideo
Edad: 49 años
Otros datos: Es casada y tiene dos hijos. Le gusta leer.

Trayectoria en temas ambientales
Es profesora de Geografía egresada del Instituto de Profesores Artigas (IPA) en el año 1987. También se recibió de ingeniera agrónoma en la Facultad de Agronomía de la Universidad de la República en 1992. A partir de marzo de 2005 es directora Nacional de Medio Ambiente del Ministerio de Vivienda. Fue encargada de la Dirección de Probides (Programa de Conservación de la Biodiversidad y Desarrollo Sustentable de los Humedales del Este), en Rocha, entre los años 2003 y 2004, siendo previamente la responsable del Servicio de Educación Ambiental y Divulgación Técnica de ese programa (1998-2003). Desde 2002 es coordinadora de la Unidad Río de la Plata del Programa Train Sea Cost de las Naciones Unidas. También fue docente universitaria.