Los pronósticos climáticos extendidos, tanto oficiales como particulares, no son alentadores para los hombres de campo. Es que a pesar de las lluvias que cayeron en los últimos días, se cree que 2009 será otro año seco. Esta perspectiva pone en duda el futuro de las pasturas que deberían sembrarse a fines de febrero y, a más largo plazo, el cultivo del trigo.
En diálogo con LA CAPITAL Carlos Cerboni -encargado de prensa de la Sociedad Rural de Mar del Plata- advirtió que las perspectivas que surgen de los informes del INTA-Castelar más otros del Servicio Meteorológico Nacional y de distintos pronosticadores particulares, "no son buenas".
El dirigente reconoció que "está lloviendo algo" pero aclaró que "no es suficiente" y recordó que "tenemos un déficit de 300 milímetros de agua, por lo que el perfil de la tierra todavía está seco. Para que el agua penetre y se mantenga la humedad tienen que caer, como mínimo, entre 70 y 80 milímetros en no más de dos días. Si llueve menos, el calor y el viento lo evaporan".
Asimismo explicó que las perspectivas para el resto del año no son muy diferentes. "Va a llover, pero poco y eso va a afectar los distintos cultivos" advirtió para luego aclarar que que "éste no es problema nuevo. El promedio anual viene disminuyendo desde 2006, lo que pasa es que recién ahora cobra su mayor magnitud, porque se agudizó durante la primavera y el verano y el suelo ya había perdido todas sus reservas de humedad".
Luis Aceituno, presidente de la Sociedad Rural de Mar Chiquita, coincidió con su par marplatense en que el faltante de agua todavía es importante en la zona. "Se necesitan entre 80 y 100 milímetros de agua" dijo y advirtió que las precipitaciones de los últimos días fueron muy desparejas. "Hubo zonas en las que cayeron 30 milímetros y otras 60", relató.
Consecuencias
Tanto la actualidad climatológica como las perspectivas para los próximos meses tienen incidencia en el día a día de los productores, ya sean ganaderos o agricultores.
Aceituno relató que en algunos campos de Mar Chiquita -zona eminentemente ganadera- se intentó comenzar a remover la tierra pero que "fue imposible, porque es un garrote".
Este faltante de agua cobra mayor relevancia con vistas a la siembra de pasturas que debería realizarse a fines de febrero o -como máximo- a principios de marzo. "Antes hay que preparar los lotes y no va a ser demasiado fácil" dijo el dirigente quien recordó que esos implantes son imprescindibles dado que a raíz de la sequía "el pasto prácticamente desapareció".
Aunque con menos urgencias, quienes se dedican a los granos también tienen que tomar decisiones cuyo éxito o fracaso depende de las próximas lluvias. Cerboni consideró que el mes clave para tomar decisiones será mayo y que hasta entonces "habrá que hacer todo lo posible para conservar la poca o mucha agua que caiga".
Para ello entendió que "lo más recomendable es aplicar glifosatos, para que las malezas no se chupen toda la humedad y así poder llegar a la siembra del trigo y poder cosechar algo el próximo verano".
En este contexto, Cerboni descartó la alternativa del riego artificial. "De Santa Clara para el Norte el agua no sirve, porque no hay caudal y tiene alta concentración de minerales -dijo-. En la zona de Balcarce las condiciones son mejores, pero el costo es demasiado alto".
"Las consecuencias de la sequía ya son desastrosas" afirmó finalmente Cerboni quien por último aclaró que el resto de las decisiones no sólo dependen de la lluvia: "También habrá que ver si el gobierno cambia su política y levanta las retenciones, porque de lo contrario será más conveniente no sembrar nada y dedicarse a otra cosa", concluyó.
Los próximos meses según el Inta-Castelar
La página del INTA Castelar es una de las más visitadas por los productores de la zona. Es que los pronósticos extendidos del Instituto del Clima y el Agua de dicho organismo son considerados como los más "certeros" del país por los hombres de campo.
Según el informe publicado en dicho sitio, las precipitaciones pronosticadas para el bimestre febrero-marzo para las localidades de Mar del Plata y Balcarce son "superiores a las normales". El mismo pronóstico rige, hasta el momento, para marzo-abril en tanto que para abril-mayo se espera un nivel de lluvias "inferior al normal".
El informe del INTA-Castelar incluye pronósticos bimestrales de lluvias calculados para la campaña agrícola 2008-2009 que se iniciada con el bimestre julio-agosto del año anterior.
Según explica el sitio, los partes se actualizan en forma mensual y la última revisión se realiza un mes antes del bimestre pronosticado. Además, a medida que transcurren los meses se van incorporando nuevos pronósticos.
|
|
|