La contaminación del río Charingo con desechos de cocaína, provenientes de Pantipata, una comunidad “aguas arriba”, colmó la paciencia de los agricultores de Tiomoko, Charingo, Sexta Parte, Chaca Grande y San Jorge (Vinto), que denuncian atentado ambiental.
La Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) detectó en Pantipata 115 fábricas de cocaína en 2008. Los denunciantes dicen que hay al menos 300, que presuntamente producen 200 kilos de droga por semana. “Hay días en que se ve coca molida y espuma en el río”, contó un agricultor.
Las localidades afectadas bloquearon con piedras y troncos desde hace tres semanas los caminos de acceso a Pantipata y cavaron zanjas de dos metros de profundidad para evitar el ingreso de precursores.
Hasta ahora, toda intención de solución cayó en saco roto. La última propuesta de crear un puesto policial en el lugar fue rechazada hace una semana por el delegado presidencial Marco Carrillo, quien consideró que la medida puede generar corrupción. A ello se añade la indiferencia que han mostrado las autoridades locales de Vinto y la Subprefectura.
Los afectados dicen que por las noches los traficantes bajan y hacen disparos y detonaciones de dinamita. “Desde la mañana, día y noche, pasan autos (surubíes) con precursores. Pasan corriendo. El otro día atropellaron a un niño”, dijo una campesina a tiempo de lamentar que el agua contaminada dañe sus cultivos de cebolla.
Como ella hay decenas de agricultores, granjeros y lecheros afectados, porque las factorías se extienden a sus terrenos. Hace poco, se perdió 40 por ciento de pollos, que van a los mercados de La Paz y Cochabamba. Murieron con Escherichia Coli, causada por consumir alimentos contaminados, según veterinarios del lugar. Las aves padecieron de una insuficiencia hepática, que las exterminó.
El ganado lechero también está enfermo con diarrea por beber agua contaminada del río. Los granjeros dicen que optan por recurrir al agua potable, pero eso les ocasiona un costo mayor debido a que tienen que utilizar bombas de agua para llenar los estanques.

Van tres años de tráfico
Hace tres años, el narcotráfico llegó a Pantipata, una comunidad rural distante a 30 kilómetros de la ciudad de Cochabamba. Desde entonces, los traficantes incrementaron sus actividades, aprovechando su ubicación estratégica para burlar el control de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn).
Las fábricas están ubicadas en una colina, desde donde se ve el camino de acceso, lo cual permite anticiparse a los operativos de la Felcn. También se cree que existe un informante dentro de la misma Felcn.
En 2007 la Felcn destruyó 80 fábricas en el lugar, que derivó en una emboscada a las patrullas antidroga y en la detención de dos presuntos traficantes. En 2008, se destruyeron 115 factorías, pero se calcula que hay 300 de características móviles.