Heladas, granizadas e inundaciones por intensas lluvias continúan afectando el altiplano y la región oriental de Bolivia, precisó hoy Defensa Civil.
De acuerdo con Hernán Tuco, al frente de esa institución, suman 15 mil 200 familias damnificadas.
El viceministro también explicó que el Gobierno destinó unos 50 millones de bolivianos (poco más de siete millones de dólares) para atender las emergencias.
Las regiones de Santa Cruz y Beni fueron las más dañadas por las precipitaciones, mientras que las bajas temperaturas se registraron principalmente en La Paz y Potosí, precisó.
Entre enero y marzo, Bolivia recibe los embates climáticos del fenómeno La Niña, aunque este año los daños son menores que en 2008, cuando se registraron al menos 60 mil familias damnificadas y 55 muertos.
La víspera, también la Cámara de Diputados aprobó un proyecto de ley encaminado a establecer el estado de emergencia ante fenómenos de ese tipo y otros como la epidemia de dengue que ya supera los 35 mil casos en todo el país suramericano.