Tras casi ocho años, el propietario de un campo ubicado en las afueras de Roca, sigue reclamando la remediación de los daños producidos en su tierra por una lluvia de petróleo. A pesar de haber realizado demandas de todo tipo, y haber recurrido a cada uno de los entes responsables de actuar en este tipo de casos, el hombre aún no ha tenido respuestas, denunció.
El dueño del campo, Agapito Mendoza, explicó que "el derrame fue en el 2001 y hasta el día de la fecha no me lo han remediado ni me han pagado tampoco". Agregó además que la empresa Pioneer Natural Resources S.A., responsable del derrame, contrató una empresa para que limpiara el terreno, tarea que en ese momento se advirtió que no demandaría menos de cinco meses. Sin embargo, los daños no lograron ser remediados y la contaminación en el campo continúa siendo alta.
No obstante, desde el DPA aseguraron que en el lugar se hicieron todos los trabajos de saneamiento.
Mendoza explicó que realizó demandas, y elevó reclamo a los organismos correspondientes "pero todos miraron para el costado y nadie hizo nada hasta ahora".
A mediados de setiembre de 2001, más de 100 hectáreas de un campo ubicado a 60 kilómetros de Roca, quedaron totalmente contaminadas por una lluvia de petróleo producto de una mala maniobra en un pozo ubicado en el lugar.
La empresa se instaló en el lugar para realizar la extracción de petróleo, y le pagaba al dueño del campo una suma de 108 pesos por poder realizar este tipo de tareas en su campo, dijo.
Alambraron cerca de 20 hectáreas del campo de Agapito Mendoza y comenzaron con las tareas, una de ellas fue la reactivación del pozo Jagüel de los Milicos A2 que hacia más de un mes que no operaba. Las maniobras realizadas por los operarios provocaron que el fluido emergiera violentamente y sin control. El petróleo se esparció por todo el campo afectando una superficie 1.500 metros de largo por 500 de ancho.
"Después del accidente, la empresa se fue de donde estaban trabajando", explicó Mendoza. La nueva empresa adjudicataria comenzó a trabajar en el terreno teniendo en cuenta las medidas de seguridad y cuidados del ambiente, según lo aseguró Mendoza.
El propietario del campo, explicó además que si bien la empresa Pioneer al momento de producirse el daño ambiental, contrató a una empresa especializada en saneamiento petrolero, sus directivos aseguraron que el trabajo demoraría no menos de cinco meses, "algo que nunca pasó porque el lugar está igual que antes", aseguró Mendoza. Agregó además que "si bien el daño ecológico es grave, no ha afectado el agua, sino que el problema es que no puedo soltar mis animales por esa zona".
El campo de Agapito Mendoza es explotado por distintas firmas extranjeras desde 1990 y en 1996 sufrió un accidente similar.
Por su parte, el representante del Departamento Provincial de Aguas de Río Negro, Aldo Sisul explicó que "desde el organismo se actuó y se hicieron muchas cosas, se realizaron las tareas de saneamiento y se hizo el seguimiento correspondiente del caso".
Agregó además que Mendoza debería acercarse a la sede del DPA en Roca para explicar cuál es la situación o el problema actual en el campo y coordinar una nueva recorrida por el terreno, ya que "si lo que dice el señor Mendoza es cierto, las tareas de saneamiento que se hicieron en ese momento no fueron del todo eficientes por lo tanto, habrá que realizar nuevas", explicó Sisul. Aclaró que el seguimiento está constatado en informes que fueron presentados ante la Fiscalía cuando Mendoza radicó la denuncia penal en el 2001.