Una baja cercana al 40% en el canon de riego sería el principio de solución al conflicto que los chacareros mantienen con el Consorcio del Valle Inferior.
La tarifa seguiría en 124 pesos anuales por hectárea pero habría subsidios de 34 pesos desde el Departamento Provincial de Aguas (DPA) y el Instituto de Desarrollo del Valle Inferior (Idevi).
De la actividad privada sólo saldrían 90 pesos, según una negociación entablada entre la Cámara de Productores y la intervención a ese ente de servicios.
Aún resta pulir algunos detalles, como para formalizar los convenios de pago con esa merma.
La reunión fue encabezada por Irineo Guerra, quien actuó en representación de los productores,y Claudio Vidondo a cargo de la intervención.
Así se respetará la postura del DPA sobre el cálculo tarifario, ya que de acuerdo a lo adelantado por el titular del organismo, Horacio Collado, es la única vía para mantener la prestación del servicio.
Si bien el canon fue fijado en la mencionada cifra, la primera cuota bimestral correspondiente a 2009 se facturó sin dicho incremento, dado que el consorcio la bonificó como un gesto destinado a descomprimir la renuencia productiva.
En realidad, el rechazo no partió de la cámara de productores, si de un centenar de chacareros que no están vinculados directamente con la entidad productiva que conduce el vicepresidente de la Federación, Guerra.