Primero fueron las cañerías de las cloacas que comenzaron a hacer eclosión. Ahora son las del agua potable y los vecinos reclaman por la presencia de charcos por las roturas.
De acuerdo con un informe de la secretaría de Servicios Públicos de la municipalidad, en lo que va del año se detectaron 30 pérdidas de agua que fueron notificadas a Aguas Rionegrinas.
Entre las calles más afectadas figuran Naciones Unidas, Pagano y Castello. Ayer los vecinos del lugar denunciaron un gran charco de agua. Cuando llegaron los técnicos de la concesionaria determinaron que la pérdida se registraba a una cuadra de allí, en Namuncurá al 1.900.
Además de los problemas que ocasiona a los transeúntes y automovilistas el agua en las calles, la presencia constante del líquido deteriora el pavimento y en invierno -con las bajas temperaturas- se congela con el consecuente riesgo que significa.