A causa del estrepitoso colapso de las cloacas del hospital Anzoátegui, de Coronel Moldes, las autoridades sanitarias del establecimiento debieron suspender la atención en los consultorios externos y trasladar los pacientes internados a centros asistenciales de las localidades aledañas.
La emanación de olores y los conductos sanitarios colmatados obligaron a realizar una evaluación de las refacciones realizadas hace dos años en esta institución, para saber a ciencia cierta cuál fue el problema que provocó el colapso del sistema cloacal interno del edificio.
"Descubrimos que no teníamos la conexión a la red troncal del servicio sanitario del pueblo. Tuvimos que evacuar a los internados y suspender momentáneamente las consultas externas", explicó a
El Tribuno, Sergio Villalpando, gerente general del nosocomio moldeño.
Personal del área de Obras Públicas del municipio, al acudir en auxilio del hospital, descubrieron una enmarañada red cloacal con seis cámaras sépticas y otras tantas de inspección, todas obstruidas y sin mantenimiento adecuado, según describieron los obreros.
"Estuvimos a punto de cerrar el hospital y trasladar las urgencias al hospital de El Carril. Así no se podía estar", comentó Villalpando.
Previo a la inspección municipal, se clausuraron los baños y uno de los sectores de ingreso a la institución, pero los consultorios externos seguían atendiendo a los pacientes, por lo que los baños igualmente eran ocupados por la gente.
Por eso, y "por seguridad sanitaria, debimos suspender las atenciones en las diferentes especialidades que tenemos. Apenas concluyan los arreglos el personal del municipio, estimamos que atenderemos con normalidad a los vecinos de esta localidad", aseguró el gerente del nosocomio.
Por su parte, los encargados de estas obras calcularon que la apertura del ala de consultorios clausurada se podrá hacer entre mañana y el martes próximo.
"Los trabajos están acelerados, pero debimos buscar como ?topos? las cañerías y las extrañas conexiones hacia las cámaras. Llamativamente, no existen planos de las refacciones y ampliaciones. Esto dificultó bastante los trabajos", manifestó el capataz de la obra. Finalizados estos trabajos, y recién después de dos años, el hospital estará conectado a la red troncal del servicio sanitario, para sorpresa de las autoridades del hospital y de los obreros. En tanto, las cámaras clausuradas quedarán fuera de servicio.
Hace un par de años el mismo centro de salud sufrió la caída de mampostería y el techo de la guardia recién remodelada. En la ocasión, la empresa a cargo de estos trabajos no se hizo responsable de los daños producidos luego de un temporal de viento y lluvia, tal como ocurrió en estos días, luego de descubrirse la deficiente conexión cloacal.
La vieja estructura tiene refacciones en diferentes áreas. Sin embargo, las instalaciones de cloacas y de la red de agua nunca fueron tocados. A raíz de esto el hospital Anzoátegui, que se caracteriza por atender casos de mediana complejidad, debió derivar las urgencias hacia el hospital San Rafael de El Carril.