El marcado déficit pluvial que afecta a la región está resintiendo la provisión de agua potable, por lo que desde la Cooperativa Eléctrica Limitada de Oberá (Celo) vienen realizando cortes programados y rotativos para preservar el vital líquido.
Ante este panorama, desde la entidad alertaron que de no concretarse las lluvias anunciadas, en los próximos días la situación se agravaría aún más.
“La situación es crítica debido al déficit hídrico que sufrimos. En el arroyo Ramón el paso del agua se da por debajo de la toma y se está consumiendo toda el agua del arroyo”, alertó Julio Ansín, gerente de agua potable.
Por ello, explicó que realizan cortes rotativos cada dos días y en horario nocturno. Con relación a la perforación del Acuífero Guaraní, comentó que “la bomba está funcionando a full y normalmente todo el caudal viene a la cisterna. Gracias a eso no hay más horas de corte”.
“Dios quiera que con la lluvia anunciada para dentro de quince días se normalice el caudal del arroyo Ramón, porque de persistir la falta de lluvia vamos atener mayores cortes”, reconoció.
En este contexto crítico, remarcó la necesidad de que los usuarios tomen conciencia de la gravedad de la situación y racionalicen el uso del vital líquido.
La falta de agua se reitera en diferentes puntos de la zona Centro, como en San Martín, donde cuentan con un pozo perforado cuyo caudal disminuyó dramáticamente.
“El pozo no alcanza para abastecer al pueblo porque las napas están muy bajas. Por ello la Municipalidad de Oberá está colaborando con sus camiones cisterna”, acotó Ansín.
También en Guaraní
Otro de los municipios en crisis es Guaraní, ya que en los últimos días se registraron inconvenientes en la provisión de agua potable, al punto que desde la Mutual Andrés Guacurarí, proveedora del servicio, calificaron la situación como “desesperante”.
Juan Domingo Ferreira, tesorero de la entidad, aseguró “la situación es desesperante, ya que el embalse desde donde captamos el agua para procesar, está virtualmente seco”. Reconoció además que “cuando trabajamos en un cian por ciento de la capacidad abastecemos normalmente a la población, pero hoy por hoy estamos en un cincuenta por ciento”.
La entidad presta servicio a cerca de 480 socios y abastece a unas 4.000 personas, entre ellos los alumnos de una escuela primaria y un secundario, el hogar de ancianos, la comisaría y un puesto de Salud.
Entre las alternativas a la crisis figura la concreción de un pozo perforado que está prácticamente listo, aunque la empresa contratista se demora en la entrega de la obra.
“Pero teniendo en cuenta las necesidades, la gravedad del caso y la falta de respuesta de la empresa, optamos por ponerlo en marcha nosotros”, explicó Ferreira.
Por ello, la entidad viene trabajando en conjunto con la Municipalidad para decidir los pasos a seguir, además de enviar notas a las instituciones del medio para insistir sobre el uso racional del agua potable.
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