Unas cuatro mil personas permanecen cercadas hoy por inundaciones en el estado australiano de Nuevo Gales del Sur, en la costa este, declarada zona de desastre tras 30 horas de incesantes aguaceros.
Toda la región fue cubierta por continuas lluvias que parecen ahora ceder, según indicó el Servicio Estatal de Emergencias (SEE) al revelar que los daños afectan carreteras, viviendas empresas y otros objetivos pero que no se registran víctimas fatales.
El SEE distribuye alimentos, medicinas y agua a las comunidades afectadas, aunque señaló que estos fenómenos son frecuentes en la zona costera y los moradores están preparados.
Unos 440 milímetros de lluvia cayeron en las últimas 24 horas y anegaron toda la zona, en particular alrededor de la bahía de Coffs, el valle de Kalang, y las localidades de Thora, Darkwood y partes de Bellingen.
Una severa alerta se mantiene vigente en las medianías de la costa y los ríos del norte hacia donde se desplazan este jueves los torrenciales aguaceros.
El Buró de Meteorología advirtió de sucesivas riadas en poblados que alcanzan hasta la frontera del estado de Queensland, en el noreste de esta isla-continente.