La Provincia ha firmado un convenio con la Municipalidad de San Benito por el que se desmalezará y se dragará el arroyo Las Tunas, en el tramo atraviesa la ciudad, entre la ruta 18 y la ruta 12.
Concretamente, la Provincia destinará 92 mil pesos a San Benito para despejar los taludes de la vegetación que complica el libre curso de las aguas.
Tan obstruido está el arroyo por la vegetación y la basura, que se dificulta grandemente el escurrimiento: en la última tormenta, a principios de marzo, el arroyo creció hasta tapar el puente que cruza frente al Parque Vieytes y casi muere ahogada una maestra que iba a su trabajo en San Benito.
Después del desmalezado, que comenzará se estima la semana que viene, el terreno quedará preparado para el ingreso de la dragolina que pertenece a la Provincia y que completará el trabajo limpiando el lecho del arroyo, que podrá correr con más fluidez hacia el río.
Pero para la Municipalidad de San Benito el convenio tiene un sentido más que nada social: “Esto es bienvenido, porque la Comuna en este momento no tiene para entregar subsidios y la situación es muy difícil”, dijo el intendente de San Benito, Angel Vázquez, que ha decidido usar el dinero para pagar “jornales” a los vecinos desocupados que viven a la vera del arroyo con el fin de que realicen las tareas de limpieza.
JORNALES. En diálogo con EL DIARIO, Vázquez explicó que la draga está pedida “desde la gestión de Jorge Busti, pues aunque se había limpiado el arroyo desde la ruta 18 hasta el Acceso Norte, faltaba San Benito. Ahora, el gobierno de Sergio Urribarri hace esta otra parte”.
En cuanto a la mano de obra, Vázquez ha decido contratar “jornaleros que están desocupados de la ciudad, más que nada gente que vive al lado del arroyo para la limpieza. Para nosotros bienvenido sea, porque las obras a la vez van a paliar un poco la situación de esta ciudad”, dijo.
“Al día de la fecha tenemos un embargo de 300 mil pesos por una deuda de la gestión de 1991 y todavía tenemos que pagar 240 mil más del año 93 la semana próxima: no tenemos plata para atender la cuestión social ni para hacer frente a los jornales”, informó.
El Intendente aún no ha fijado el monto que se pagará a los trabajadores que se ocupen del desmalezado: “Tenemos que ver, hablar con los muchachos. Se paga por jornal. Hay que cubrir también los insumos, dos o tres motosierras para cortar árboles, machetes, desmalezadora. Serían alrededor de 15 mil pesos los gastos en maquinaria”, calculó.
DETALLES. El arquitecto Guillermo Federik, secretario de Planeamiento e Infraestructura de la Provincia, detalló que “en una primera instancia se encarará desde la naciente arroyo la limpieza y desmalezado barrancas, de los taludes, es decir del cañón que forma el arroyo con máquinas y herramientas manuales. Se financiará a la Municipalidad para que con personal propio y contratado ejecute en 45 y 60 días el desmalezado, destroncado y erradicación de minibasurales de terraplenes, barrancas y cauce”.
El destronque es la extracción de árboles ajenos a la flora nativa (como los paraísos) y que provocan obstrucciones en el curso de las aguas. Una vez que el trabajo esté realizado, “la dragolina que está en manos de la Dirección de Hidráulica va a profundizar el cauce, limpiando desechos sobre el lecho del arroyo. Un vez libre de obstáculos, mejorará el escurrimiento de las aguas”. Un punto destacable es que el convenio con San Benito prevé una suma mensual que se irá abonado al Municipio hasta fin de año para que realice el mantenimiento de los taludes, con el fin de que “no avance la maleza al punto en que la tenemos hoy”, señaló Federik. De los gastos de operación de la draga se hará cargo la Dirección de Hidráulica con su presupuesto.
Para destacar
Cronograma. Guillermo Federik, titular de Planeamiento, explicó que los trabajos en Las Tunas no surgieron de las consecuencias del temporal de marzo, sino que “era una obra programada. Se realiza una programación anual teniendo en cuenta distintas ciudades atravesadas por cauces de arroyo, y esto se hace en función de la disponibilidad de la dragolina”.
Modalidad similar en Paraná. En 2002 y 2003 la Municipalidad de Paraná pagaba jornales (10 pesos por día) a vecinos desocupados de diferentes barrios para hacer tareas de limpieza y desmalezado. Se llamaban planes de Emergencia Laboral, y estaban enmarcados en una ordenanza. Los representantes barriales armaban un listado de vecinos, que después cobraban por Tesorería. A mediados de 2003, se denunció compra de votos por este medio, por parte la gestión en funciones en una interna partidaria.
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