La Prefectura de El Oro y el Instituto Nacional de Riego (Inar) firmaron, el pasado 8 de diciembre, un convenio de participación para ejecutar el revestimiento de cuatro canales de riego.
Esas obras corresponden a los tramos Pajonal, Cañas Viejas, Castro-Primavera y Rosita-Cañas. Se trata de los ramales secundarios del sistema de riego Pasaje-Machala, el más grande y antiguo del norte de la provincia.
A través del convenio, la Prefectura entregó al Inar los estudios que levantó la Escuela Politécnica Nacional, para la construcción de los canales secundarios. A su vez, el Inar se comprometió a entregar las obras concluidas.
El revestimiento de los canales se contrató a través del decreto de emergencia de diciembre pasado. Pese a ello, cuatro meses después, las obras físicas no empiezan. El viernes pasado, aún se realizaba en el tramo Rosita-Cañas, de 14,6 kilómetros de longitud, el levantamiento topográfico.
Este canal es el más grande de los cuatro. Debido a la falta de revestimiento, la maleza crecida y la sedimentación, ha disminuido el paso del agua. “El contrato se firmó en diciembre, pero el anticipo se entregó el 19 de marzo pasado”, aseguró Ernesto Canelos, jefe de Zona de la constructora Cantemaq, a cargo de la obra.
Un letrero del Inar informa que el costo de esa obra alcanza los USD 6 396 485. Canelos aseguró desconocer el monto del anticipo, pero negó que se lo haya entregado en el momento de la firma del contrato.
Pese a que firmó el convenio con el Inar, el prefecto Montgómery Sánchez (actual candidato a la reelección) aseguró desconocer los detalles de los contratos.
“Mandamos una carta al Inar hace una semana para que nos indique a qué compañía y en qué monto se adjudicaron (los canales) y en qué porcentaje avanzan las obras. Hasta ahora no hemos tenido respuesta”, aseguró.
La semana pasada, diario Expreso denunció que en diciembre del año pasado, el Instituto de Riego adjudicó obras por USD 68 millones sin haber convocado a un concurso público, luego de un decreto de emergencia.
Para Washington Barragán, director jurídico del INAR, esa decisión la tomaron para evitar que USD 80 millones regresen a la caja fiscal. “En julio recibimos una asignación de USD 137 millones y teníamos seis meses para invertir todo. En diciembre, teníamos USD 80 millones sin invertir”.
Javier Valencia, presidente de la Corporación Reguladora del Manejo Hídrico de Manabí, informó que en esta provincia el Inar financia la reconstrucción de 22 kilómetros de canales de riego.
El funcionario justificó el retraso en el avance de las obras. “Los recursos para los trabajos fueron asignados en diciembre de 2008, a pesar de que pedimos en abril del mismo año”.
El decreto de emergencia firmado en diciembre pasado también dejó relegados algunos proyectos, que están a la espera de su ejecución desde hace años.
Este es el caso de los estudios para la unificación de cinco acequias, que ayudará a rehabilitar el canal de riego San Isidro, en el cantón Espejo, en Carchi. La infraestructura no funciona desde hace 30 años.
Lenin Carrera, alcalde de Espejo, comentó que el Inar se comprometió a entregar los estudios y a empezar con la rehabilitación.
Los campesinos de la zona no saben si el proyecto les favorecerá. Parte del líquido sirve para el abastecimiento y distribución de agua potable en el cantón Mira.
Carrera dijo que hay el compromiso de que de los 200 litros por segundo que se captará en el canal, la mitad será para beneficio de los agricultores de San Isidro.
En zonas aledañas, como Impuerán y San Vicente de Pusir, las obras las gestionan los propios agricultores en el Inar, sin que hasta ahora se haya concretado la asignación de recursos.
Al referirse al tema de la emergencia, el ministro de Agricultura, Walter Poveda, informó que pidió a la Contraloría que revise los procesos en el Inar.
Sierra centro y Austro
La Dirección Regional del Instituto Nacional de Riego (Inar) en Tungurahua y Pastaza ejecutó 59 proyectos el año pasado. Según un informe proporcionado por la entidad, 38 obras de rehabilitación fueron solicitadas por beneficiarios de los canales de riego Ambato-Huachi – Pelileo, Mocha-Quero – Ladrillos y Alta Fernández.
En los trabajos de revestimiento del canal de riego Checa–Sidcay–Ricaurte, de 11,7 kilómetros de extensión, trabajan 16 personas. Ellos laboran en la parroquia cuencana de Checa.
Esta obra está en manos del Instituto Nacional de Riego en Azuay (Inar). Se ejecuta el revestimiento del canal. Según el contratista, Augusto Vélez, la obra tiene un avance global de, aproximadamente, el 50%. |
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