La Ciudad de México, la segunda mayor del mundo, vive hoy una crisis de abastecimiento de agua potable que afecta a más de cinco millones de personas.
Sus habitantes seguirán sufriendo la escasez del líquido, al menos cuatro días más, debido a un corte de ahorro y trabajos de mantenimiento en el sistema de presas Cutzamala que la alimentan, retomado esta semana.
Este grupo de embalses proporciona agua a 20 por ciento de la capital y a varios municipios del colindante Estado de México.
Con este suman tres los cortes de agua de los varios programados por las autoridades este año para realizar trabajos de mantenimiento y además, para elevar los niveles de las siete presas.
Cutzamala alcanza hoy sólo un 47 por ciento de almacenamiento, menor al promedio histórico de 69 por ciento a causa de las pocas precipitaciones en el 2008.
A partir de este viernes, miles de policías desde aire y tierra vigilarán la ciudad de México para evitar que los ciudadanos derrochen agua el Sábado de Gloria, como es tradicional en Semana Santa.
Quien sea sorprendido desperdiciando agua será multado o castigado con hasta 36 horas de arresto, indicó el secretario de Seguridad Pública del Distrito Federal, Manuel Mondragón.
Subrayó que la medida es para evitar el uso inadecuado del recurso hídrico en momentos en que cientos de miles se quedarán sin servicio este fin de semana.
En las acciones participarán alrededor de 10 mil uniformados y helicópteros los cuales vigilarán la ciudad y zonas conocidas en las que hay derroche de agua.
|
|
|