Por medio del proyecto impulsado por los legisladores Carlos Lobera, Jorge Guc y Miguel Ángel Melar, se aprobó una resolución que se dirige al Poder Ejecutivo solicitando la declaración de zona de desastre agropecuario a la totalidad de los Departamentos de la Provincia, los que se hallan afectados por sequía que ha producido pérdidas superiores al 80 por ciento en la producción y en la capacidad de producir.
Asimismo, el Cuerpo peticionó que se propicie la ejecución de acciones tendientes a aliviar la situación que soporta el sector agropecuario provincial.
En los fundamentos, los legisladores afirmaron “la provincia viene soportando los efectos de la sequía producida por la escasez de lluvias desde el año pasado, ya en el mes de mayo del año anterior, por circunstancias críticas ocasionadas por la sequía, resulto necesaria la declaración de emergencia agropecuaria para varios departamentos”. “Desde entonces – apuntaron - la situación, lejos de mejorar, se ha agravado y crece la preocupación por el impacto negativo de este fenómeno, ya no tan solo en lo productivo, sino también, en lo económico y social”.
“La provincia – prosiguieron diciendo - lleva casi un año de sequía, desde marzo del 2008 que no hay lluvias importantes. En el mese de enero último, solamente se registraron algunas lluvias que dieron un poco de respiro a los productores agropecuarios pero que no mitigaron los efectos causados por la sequía. Los cultivos, principalmente el algodón, tanto de la siembra temprana como la tardía, se encuentran seriamente afectados, hay registros de rindes que promedian los 200 o 300 Kg. por hectáreas”.
Finalmente los diputados agregaron “Dejando de pagar los costos de producción, que de hecho no se pueden pagar, tampoco le alcanza al productor para vivir. Otra actividad que tiene datos que alarman es la ganadería, donde su situación es muy crítica y compleja: mortalidad de animales, venta anticipada de vientres debido a la poca capacidad de alimentar a los animales, lo que deja de manifiesto que sin lugar a dudas esta zona enfrenta una de las sequías más crudas de los últimos tiempos”.