“Las informaciones serán suministradas a partir del lunes” hizo decir ayer el titular de Petropar, Pablo Sugastti. Los valiosos puntos en juego, el hermetismo, la deuda sideral y las contradicciones presidenciales confirman que podríamos estar a punto de entregar a Venezuela nuestra soberanía energética, tal cual lo hicimos en el pasado con nuestros derechos cedidos al Brasil en Itaipú y a la Argentina en Yacyretá. Colegas venezolanos nos reportaron ayer que también en PDVSA están “superherméticos” con respecto a las negociaciones.
Planta de Petropar. Dicen que quieren formar una empresa mixta con PDVSA para optimizarla y refinar petróleo. La empresa venezolana ya desembarcó en Paraguay.
Fernando Lugo, presidente del Paraguay, y Pablo Sugastti, titular de Petropar, podrían pasar a la historia. O como los grandes administradores que consiguieron renegociar una deuda sideral (probablemente dos veces más alta que todo el patrimonio de nuestra petrolera), a baja tasa de interés, sin entregar nada a cambio. O como la nueva dinastía de entreguistas que regalan soberanía energética a cambio de espejitos, tal como ocurrió en el pasado cuando entregaron Itaipú al Brasil y Yacyretá a la Argentina.
¿POR QUÉ EL TEMOR?
Varios ingredientes sazonan convenientemente nuestras sospechas. Ayer al mediodía ya el diario El Universal de Caracas publicaba lo que hace días venimos mencionando: “Se espera que Lugo y Chávez conversen sobre la renovación de un acuerdo entre las petroleras de ambos países para proveer diésel venezolano al mercado paraguayo con condiciones financieras preferenciales”.
Mientras esto ocurría en Caracas, en Asunción la petrolera estatal se cerraba herméticamente a los medios periodísticos. Intentamos entonces por el lado de periodistas venezolanos que terminaron reportando lo mismo: “En PDVSA están superherméticos acerca de las tratativas sobre el Paraguay”.
CERRADO HERMETISMO
Ayer a la mañana solicitamos datos, que pese a ya haber sido hasta publicados nos fueron negados. “Las informaciones serán suministradas a partir del lunes” fue la respuesta obtenida ayer en Petropar cuando solicitamos cifras de compras anuales, los pagos anuales en fletes, el origen y monto de la deuda de la estatal. Cualquiera diría que requerimos informaciones estratégicas de comercialización, alguna información clave de mercado, pero no: los datos que nos fueron negados en el pasado figuraban inclusive en el portal digital de la petrolera.
SILENCIO DE AUTORIDADES
Llamamos también al hotel Meliá Caracas y no pudimos hablar con Pablo Sugastti. Intentamos comunicarnos con el asesor jurídico de la Presidencia, Emilio Camacho, y su celular daba cerrado.
Otro intento fue con Hamed Franco, quien también está en Venezuela, pero no acostumbra a usar teléfonos móviles, y el único que respondió fue el ministro de Comunicación, Augusto Dos Santos, quien prometió averiguar lo que pudiera. Estos días pueden ser clave en las negociaciones que sostienen funcionarios públicos paraguayos sobre el futuro de la petrolera estatal y el compromiso que como nación realicemos sobre nuestra soberanía energética.
Según Pablo Sugastti, se intenta convencer a venezolanos de pagarles la deuda con una tasa del 2% anual a 15 años en lugar del 18% que se abona ahora, pero existen fuertes sospechas de que en el fondo se estaría fraguando un feroz negociado que solo favorecería a unos pocos.
Senado investigará deuda contraída por Petropar
El Senado aprobó ayer la formación de una comisión especial ad hoc que investigará y emitirá dictamen sobre las “abultadas deudas contraídas por Petropar”.
La propuesta fue presentada por el senador Alfredo Jaeggli (PLRA), quien integrará el equipo junto a los senadores Luis Alberto Wagner (PLRA), Miguel Carrizosa (PPQ), Lilian Samaniego (ANR) y Herminio Chena (Unace).
La comisión tiene la obligación de investigar y presentar un dictamen en 30 días a más tardar por mandato de la misma cámara.
GOBIERNO DE NICANOR
La monumental deuda contraída por Petropar asciende a unos 400 millones de dólares, de los cuales unos 317 millones de dólares (unos 1,7 billones de guaraníes) corresponden a deudas contraídas con Petróleos de Venezuela (PDVSA).
Las deudas corresponden en su mayor porción a cifras que fueron acumulándose durante la administración de Alejandro Takahasi al frente de la petrolera. Según referentes de la estatal, tienen que ver con monumentales compras que se hacían, sobreabastecimiento de stock y una menor salida del producto con la consecuente menor contrapartida.
Los contratos con PDVSA establecen 2% de interés por facturas a 90 días de plazo, pero las mismas o no pudieron o no quisieron pagarse y fueron venciendo, con lo cual provocaron el paso a intereses que trepan al 18% anual. Actualmente, Petropar tiene una deuda vencida de US$ 270 millones por los que acumula una deuda –solo en intereses– de unos 8 millones de dólares mensuales a favor de PDVSA, según el propio Pablo Sugastti.
En los próximos días inclusive esta deuda subirá considerando que hay otros 47 millones de dólares que están a punto de vencer y por los que también pasaremos de un costo de 2% de interés a 8 veces más: 18%.
TIENEN MÁS DINERO PARA GASTAR
En setiembre del año pasado Petropar recibió la bendición del Senado, que le dio vía libre para ampliar su presupuesto. Más de 1 billón 500.000 millones de guaraníes le fueron ampliados para supuesta compra de combustible, lo que significaría que dispusieron de más dinero aún para gastar en compra de combustibles.
Unos 1.572.773.019.078 guaraníes le fueron ampliados el año pasado; en su momento, argumentaron que tal monumental cantidad de dinero era para respaldar las subas del petróleo que se producían a nivel internacional. Ayer intentamos conocer esas cifras, pero César Riart, encargado de despacho, nos hizo decir que recién a partir del lunes.
Lugo aún no autoriza la firma de contrato entre petroleras
El presidente de la República, Fernando Lugo, aún no ha autorizado al titular de Petropar, Pablo Sugastti, a suscribir acuerdo alguno con su par de Petróleos de Venezuela (PDVSA), y ello dependerá de una conversación personal que mantendrá con el presidente Hugo Chávez.
“Aún no hay ninguna firma”, es lo que escuetamente informó anoche desde Venezuela el director de Comunicaciones de la Presidencia de la República, Rubén Penayo.
Explicó que, ante la consulta de ABC al Jefe de Estado de si ya autorizó al titular de Petropar Pablo Sugastti a suscribir la cuestionada renovación de contrato entre la estatal paraguaya y PDVSA, respondió que depende de una conversación personal que entablará con el presidente venezolano Hugo Chávez.
Ante la insistencia de cuándo se concretaría dicho encuentro, Penayo respondió que era posible esta mañana, en el marco de la VII Cumbre de la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de América (ALBA), que se desarrolla en Cumaná (al este), o ya en Trinidad y Tobago, donde igualmente participará de la V Cumbre de las Américas, que se celebrará hasta este domingo.
Se desconocen hasta ahora los términos del contrato que estuvo negociando en los últimos días el titular de Petropar con su par de PDVSA, Rafael Ramírez, pero a todas luces se perfila un nuevo negociado, que con el supuesto argumento de reducir la millonaria deuda vencida que tenemos con Venezuela, estamos cerca de entregarles nuestra soberanía.
|
|
|