La Cancillería concretó ayer la presentación formal ante la Comisión de Límites de las Naciones Unidas del reclamo sobre la extensión de la plataforma continental en 1.700.000 kilómetros cuadrados. Es para determinar los derechos de soberanía para explorar y explotar los recursos naturales más allá de los casi cinco millones que ya se reconocen dentro del área argentina. El vicecanciller, Victorio Taccetti, destacó que no solamente es importante el reclamo por “la soberanía, sino también desde el punto de vista económico”. Hay incertidumbre por la posible presentación del Reino Unido, que el año pasado anticipó que pediría extender de 200 a 350 millas los límites de las islas Malvinas.
“El objetivo es demostrar científicamente que la corteza continental se extiende más allá de las 200 millas (370 kilómetros) que estaban estipuladas por la ONU”, explicó desde Nueva York a Página/12 Frida Armas, especialista en derecho internacional y coordinadora de la Comisión Nacional del Límite Exterior de la Plataforma (Copla). La presentación fue efectuada por el vicecanciller Taccetti, quien destacó que la importancia del reclamo es “no sólo desde el punto de vista de la reafirmación de la soberanía, sino también desde el punto de vista económico, porque tiene una relevancia concreta, importante y estratégica”.
El documento está compuesto por 850 kilos de papel contenidos en 34 cajas, que tienen la elaboración, análisis y conclusión científicos y técnicos que fundamentan la anexión de 1.700.000 kilómetros cuadrados que se sumarían a los casi cinco millones que se encuentran dentro de las 200 millas que impone la ONU. En las distintas etapas de la investigación participaron entidades como la Universidad Nacional de La Plata, de Buenos Aires, de Rosario, de San Juan, el Servicio Geológico Minero Argentino (Segemar) y la Armada, entre otros. “Se trata de una presentación interdisciplinaria y científicamente muy sólida, producto de un trabajo realizado a lo largo de los últimos doce años”, señaló el vicecanciller Taccetti.
Dentro del reclamo presentado por Argentina se encuentra el lecho y subsuelo de las áreas submarinas que exceden los límites actuales y que contemplan el derecho soberano de explotación en la zona de las islas Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur, así como en el sector antártico argentino. El año pasado el gobierno británico había dejado trascender que presentaría el pedido de extensión de los límites en las Malvinas llevándolo de 200 millas a 350. Hasta el momento los ingleses no realizaron ninguna presentación ante la ONU, pero aún tienen tiempo de hacerlo hasta el 8 de mayo. De ser así, además de objetar la posición inglesa, “lo que va a suceder es que el sistema de Naciones Unidas va a definir que existe una controversia y eso es algo que abona nuestra posición, que busca que la comunidad internacional reconozca la existencia de esta controversia”, planteó Victorio Taccetti, en referencia a la reticencia, por parte de las autoridades británicas, de abrir la discusión sobre la soberanía de las islas Malvinas.
El avance tecnológico en el campo de la exploración y la extracción de recursos naturales en zonas antes inaccesibles hizo que la ONU abriera la instancia de extensión de los límites antes establecidos. “El criterio que subyace detrás de esto es que los Estados ribereños puedan explotar sus recursos del lecho submarino y eso implica hablar de petróleo y de gas”, explicó Taccetti y agregó que antes que la presentación argentina existían otras “diez para ser analizadas por la ONU”. Pero además se calcula que antes de que se cumpla el plazo para concretar los reclamos, todavía resta que entre 20 y 25 países más expongan sus casos. Luego el trabajo de análisis de la Comisión de Límites de las Naciones Unidas sobre los trabajos presentados puede durar cerca de dos años, en los que el cuerpo puede requerir información adicional, ampliaciones o aclaraciones al respecto. El primer escalón será en septiembre, cuando Argentina deberá realizar una “presentación oral” de la documentación entregada que, a partir de allí, comenzará a ser analizada por una subcomisión integrada por siete técnicos de la Comisión de Límites de Naciones Unidas.
Foto: Gentileza Cancillería |
|
|