Tras 24 horas de escasez de agua en varios barrios de Montevideo, el servicio de agua potable comenzó, aunque lentamente, a normalizarse.
En algunos barrios todavía no se reestableció el servicio. Los lectores de EL PAÍS digital, Enzo, Claudio y Mauricio del Buceo, cuentan que al mediodía todavía no le ha vuelto el agua. Igual es la situación de Andrés de La Blanqueada, Ana de Belvedere, Gustavo de la Unión, Ana de la Aguada, Edel del Prado Norte y de Jorge de Palermo (Vea nota aparte para saber más sobre nuestros lectores).
Según informaron fuentes de OSE, algunas zonas pueden tener problemas en lo relacionado con la presión del agua y que puede salir turbia pero que no hay riesgo para la salud.
La falla en la cuarta línea de bombeo generó que casi medio millón de personas se quedaran sin el servicio de agua potable y debieran recurrir al ingenio para poder cocinar y asearse.
La situación más complicada se generó en los centros de salud. Si bien OSE abasteció en algunos casos con camiones cisterna, el agua no alcanzó para cubrir las necesidades básicas de algunos hospitales.
Familiares de pacientes internados en hospitales como el Pereira Rossell o el Policial realizaron quejas y reclamaron más acción de OSE en el reparto de agua. "No puede ser que no se tome en cuenta a los enfermos, dónde están los camiones del Ejército cuando se necesitan", dijo un familiar ayer en la noche a Canal 4.
Hoy temprano en la mañana, el centro de diálisis del Hospital Pereira Rossell ubicado sobre la calle 20 de septiembre recibió abastecimiento de agua por parte de OSE a través de un camión cisterna.
Primaria y Secundaria, ayer, debieron suspender las clases del turno vespertino por la falta de agua.