Pasaron varios meses desde que finalizaron los análisis para verificar el estado del agua que consumen los vecinos de Concepción, sin embargo, ONG ambientalistas denuncian que el Gobierno jamás dio a conocer los resultados. Mientras tanto, ya comenzó el estudio del estado de ríos afluentes de la cuenca Salí-Dulce.
Ya pasaron alrededor de nueve meses desde que finalizó la segunda etapa de análisis del agua de diversos puntos de la ciudad de Concepción, pero los vecinos siguen ignorando los resultados.
Se trata de tomas de muestras de líquido realizadas en siete puntos diferentes a través de las cuales se busca determinar el estado de toda la red de agua de Concepción ya que la primera etapa sólo se centró en barrio El Nevado, de esa ciudad.
Sin embargo, cuando desde el Gobierno ya se puso en marcha la tercera instancia de análisis (destinada a verificar el estado de ríos afluentes de la cuenca Salí-Dulce) aún no se difundieron cuáles fueron los resultados de los análisis de la etapa anterior.
“Mandamos constantes pedidos de informes y de reuniones al secretario de Medio Ambiente de la provincia, Alfredo Montalván, para que nos informe las conclusiones de los análisis. Hasta ahora no tuvimos respuestas lo que genera incertidumbre en la gente”, afirmó a primerafuente el referente de la ONG Unión de Vecinos del Sur, Gustavo Masmud.
Las pericias se realizan tras la presión social ejercida por vecinos de la zona y organizaciones ambientalistas quienes temen que el agua que se consume se encuentre contaminada debido a enterramientos de concentrado vertidos por roturas del mineraloducto de Minera Alumbrera en cercanías del dique Villa Lola (Alpachiri), hace aproximadamente, 8 años atrás.
De los controles participan la SAT, Ersact, Federación de ONGs Ambientalistas, Unión de Vecinos del Sur (Univec), la Secretaría de Medio Ambiente, el Siprosa y la Municipalidad local. Las extracciones son derivadas a la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) para su estudio. Allí se analiza la posible presencia de elementos como mercurio, cadmio, selenio, plata, cromo, cobre, níquel, manganeso, estroncio, oro, vanadio y arsénico.