La obra largamente anhelada por los habitantes de la zona norte de la ciudad de Salta y una de las promesas electorales del gobernador Juan Manuel Urtubey finalmente parece hacerse realidad.
El Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (ENOHSA) convocó a licitación pública para la construcción de la Colectora Máxima y Planta Depuradora de la Zona Norte.
El 28 de mayo próximo se abrirán los sobres con las ofertas de las empresas.
La obra demandará dos años y tendrá un presupuesto de casi 50 millones de pesos.
Si bien estaba valuada originalmente en cerca de 40 millones de pesos, a partir de las actualizaciones realizadas por el organismo nacional, alcanzó los 49.086.565 pesos.
En diálogo con Nuevo Diario, el ministro de Finanzas y Obras Públicas, Carlos Parodi, explicó que ya están autorizadas las partidas para la obra y que, "si todo se desenvuelve normalmente", la obra se hará realidad.
Según reza el decreto que aprobó el legajo técnico de la obra, la construcción de la colectora máxima y de la planta depuradora busca garantizar una conducción y tratamiento adecuado de los líquidos cloacales "de la población actual y futura a veinte años ubicada en la zona norte de la ciudad de Salta hasta la nueva planta de tratamiento ubicada sobre la margen izquierda del Río Mojotoro aproximadamente a cuatro kilómetros de la planta depuradora existente".
Insuficiente
En los considerandos de la norma, el gobierno provincial reconoce que el sistema de tratamiento actual resulta insuficiente y que pone en peligro la salud de las familias que viven en las casas aledañas.
Allí, se explica que originalmente la planta depuradora fue construida para el tratamiento de efluentes cloacales del barrio Ciudad del Milagro, para luego ampliarse a los barrios de la zona de Castañares.
La Provincia sostiene que, aunque inicialmente el área estaba deshabitada en un radio de aproximadamente 800 metros, la expansión demográfica y el nacimiento de nuevos barrios provocó que "esta planta fuera rodeada por asentamientos habitacionales que se fueron consolidando paulatinamente en los terrenos deshabitados llegando a sus inmediaciones y transformándose en un riesgo evidente para la salud de la población que habita este sector".
Efectivamente, las viviendas se encuentran a escasos metros de los piletones que despiden un olor pestilente.
Además, son habituales los desbordes cloacales a causa de que los efluentes exceden la capacidad de la infraestructura. Por si esto fuera poco, existen denuncias de contaminación del río Vaqueros, ya que los líquidos cloacales van a parar a su cauce sin ser tratados.
Según el decreto provincial, ahora "la planta será reubicada en terrenos adecuados lo suficientemente alejado del éjido urbano y a su vez proyectarla para todos los barrios" que se encuentren en el área delimitada por el río Vaqueros al norte, la avenida Patrón Costas, las vías del ferrocarril y la avenida Bolivia.
Foto: Archivo Programa Infoambiente |
|
|