El director general de Medio Ambiente del municipio, Andrés Meschini, informó ayer que la actividad en el matadero municipal fue suspendida por el gobierno provincial hasta que el concesionario cumplimente el tratamiento autorizado de los efluentes y el vertido sea supervisado.
Los concesionarios habían presentado ante la provincia un proyecto de tratamiento de los residuos que había sido autorizado, pero se trabajaba sin que se pusiera en marcha este mecanismo de vertido.
El matadero municipal de Centenario está habilitado por el Senasa, y el tratamiento de sus efluentes al río es supervisado tanto por Recursos Hídricos como Medio Ambiente de la provincia.
Desde el municipio, que tiene el poder de la concesión, Meschini indicó que luego de una inspección en la barda el 7 de mayo en el que se constató el enterramiento de residuos con sangre en zanjas tapadas con tierra desde hace más de un año, y al menos tres zanjas más recientes sin tapar; se solicitó a la provincia la actuación ante la presunción de que se trata de un vertedero no autorizado de residuos industriales producto de la actividad de faena.
Meschini especificó que el lunes se reunió con la dirección de Medio Ambiente de la provincia, que le comunicaron que como autoridad de policía, se conminó a los matarifes para que suspenda el faenamiento hasta que cumpla con la normativa vigente para la disposición final de los desechos de la producción del establecimiento.
Se comunicó además que paralelamente deberá sanear la zona de la barda que resultó contaminada con lo que serían los desechos del matadero.
Desde la Defensoría del Vecino en Centenario -que sigue de cerca la actividad industrial ante las denuncias de malos olores de los vecinos- se especificó que la última inspección que realizó la provincia al matadero fue en febrero, donde se habían marcado algunas anomalías. En el expediente que existe en la dirección provincial, existe un proyecto de tratamiento de residuos "verdes" (guano) y "rojos" (sangrado y otros restos) que fue aprobado por la provincia. "Ahora se les obligó a frenar la producción hasta que lleven a cabo las medidas que se autorizaron para la disposición final de los residuos verdes y rojos aprobados por Medio Ambiente de la provincia.