La sequía provocó una merma superior a las 100.000 toneladas de soja en la presente zafra, solamente entre los socios de la cooperativa Colonias Unidas (CCU), de Encarnación, Paraguay, según datos proporcionados por el presidente de la entidad, Juan Sadi Padoim.
Las semillas son raquíticas y de escasa cantidad en las vainas, a consecuencia de la prolongada sequía. Las pérdidas son varias veces millonarias para los productores.
La cooperativa tiene una cartera de préstamos a sus asociados de 12 millones de dólares, que deberá ser refinanciada.
Según el directivo de la CCU, la más poderosa del país, con unos 4.000 asociados y un movimiento comercial anual que supera los 250 millones de dólares, la merma en el rendimiento de la zafra sojera de este año significa una disminución de ingresos de unos 33 millones de dólares.
La situación implica un momento de crisis para los socios dedicados al rubro sojero, pero se está trabajando en un programa de refinanciación, dijo Sadi Padoim, quien tranquilizó a sus asociados al afirmar que la cooperativa está sólida en términos financieros, bien capitalizada y con muchos productos. Señaló que en sus silos tienen unas 40.000 toneladas de trigo que no se vendieron porque los precios estaban muy bajos.
Para refinanciar las deudas de sus asociados, la cooperativa recurrirá a la banca privada, donde pueden disponer en forma inmediata y a sola firma de los recursos necesarios para afrontar la situación. Señaló que estuvieron conversando con el titular del Banco Nacional de Fomento (BNF), pero este organismo tiene su burocracia y requisitos y lleva tiempo. En cambio, en la banca privada tienen líneas de crédito abiertas por 49.000 millones de guaraníes, y en 24 horas.
Los productores cifran esperanzas en el próximo periodo de cultivos para recuperarse de las pérdidas.
Entre los días miércoles y viernes se registraron lluvias de considerable magnitud en todo el departamento de Itapúa, lo que vino a aliviar la crítica situación de sequía que se venía prolongando por al menos tres meses.