Ya ha pasado más de una década desde aquel 15 de enero de 1999, cuando chocaron los buques Estrella Pampeana, de la empresa Shell, y el carguero de bandera alemana Sea Paraná y se derramaron, a 30 kilómetros de las costas de este distrito, 5300 toneladas de petróleo. Ayer, en un plebiscito, los vecinos de esta ciudad apoyaron un acuerdo firmado entre la municipalidad y la empresa para poner fin a un litigio judicial que había empezado tras el derrame.
De los 12.000 ciudadanos que figuran en el padrón, votaron unos 3000; el 77% se manifestó a favor del convenio y el 23%, en contra, según los primeros datos aportados anoche por esa comuna.
En el búnker montado en el Centro Cultural de la ciudad, el intendente, Fernando Carballo (Frente para la Victoria), dijo a LA NACION que lo que se aceptó con esta consulta popular es un resarcimiento de US$ 9,5 millones por parte de la compañía petrolera , además de asesoramiento tecnológico, legal y ambiental para el desarrollo de tres iniciativas: la instalación de un parque industrial, una planta de tratamiento de residuos sólidos domiciliarios y un plan de desarrollo turístico para la zona ribereña.
"La opción del plebiscito llegó después de diez años de trámites en la Justicia. El expediente estuvo seis años parado. Era un buen momento para poner fin a esta situación", dijo el jefe comunal.
-¿Qué harán con los 9,5 millones de dólares?
-Vamos a financiar los tres proyectos mencionados? Quiero que destaquen esto: que no era necesario el plebiscito. Alcanzaba con firmarlo y aprobarlo en el Concejo Deliberante. De los 12 concejales, ocho son nuestros. Además, el radicalismo está de acuerdo con el convenio, así que hubiera salido por unanimidad. Sin embargo, decidimos hacer la consulta popular.
El secretario de Gobierno, Mauricio Carrillo, informó que el presupuesto de la comuna es de 25 millones de pesos anuales. "De ese monto -precisó-, dos millones son para obras. Es decir, los 35 millones de pesos de resarcimiento representan más de 15 años de inversiones."
José Curi Casamiquela, concejal por la UCR y miembro de la Junta Electoral, contó que el radicalismo decidió apoyar el convenio luego de realizar una asamblea. "El «Vasco» Sibetti [Juan, intendente radical que estaba cuando ocurrió el derrame] también apoyó el acuerdo."
-Pero cuando ocurrió el derrame, habían reclamado 180 millones de dólares?
-El abogado de la municipalidad, Carlos Silva, dijo que ese dinero que se reclamaba eran sólo 180 millones de ilusiones. Se reclamó lo máximo, pero era imposible que la empresa pagara esa suma, dijo el intendente.
Mario Virasú, vecino de Magdalena, después de votar por el sí, opinó: "Tal vez no sea mucha plata, por el daño causado, pero es el momento para cobrar el dinero". Otro vecino, Jorge, expresó: "Es una burla. Esa plata es una miseria para una empresa como Shell. Voté por el no. Es una falta de respeto, por el daño que hicieron".
Si en algo coincide la mayoría de los vecinos consultados por LA NACION, estén o no de acuerdo con el convenio firmado entre el municipio y la empresa petrolera, es que el derrame provocó graves daños. En efecto, 523 habitantes demandaron a Shell por 359.907.384 dólares por diferentes daños que habría provocado el derrame, que incluyen suicidios, enfermedades terminales y pérdidas económicas. Esas causas siguen abiertas.
Uno de los abogados de estas 523 personas, Jorge Bibiloni, consideró: "Los montos son muy bajos en relación con los daños. Esta es una maniobra de Shell porque el jueves próximo hay una asamblea en La Haya y le conviene exhibir que éste es un tema cerrado".
Paola González, otra de las abogadas de los vecinos, opinó que, si se compara con otros montos pagados por derrames de hidrocarburos, el que ahora ofrece Shell es "irrisorio". El gerente de Relaciones Institucionales de Shell, Reginaldo Thompson, dijo ayer: "No vamos a emitir un comunicado sobre el plebiscito, ya que es una decisión de la municipalidad".

Cronología
15 de enero de 1999 . El buque petrolero Estrella Pampeana, de la empresa Shell, choca contra el buque alemán Sea Paraná y se vuelcan 5,3 millones de litros de hidrocarburos a la altura de Magdalena.

Marzo de 1999 . En marzo, la municipalidad local demanda a Shell.

22 de noviembre de 2002 . El juez Julio César Miralles, entonces titular de un juzgado de La Plata, condena a la petrolera a pagar US$ 35 millones por daños ambientales.

Diciembre de 2004 . Vecinos de Magdalena piden un embargo sobre los bienes de Shell por mil millones de pesos.

Diciembre de 2007 . Shell apela el fallo y la Corte Suprema de Justicia deriva el caso a un juzgado federal porteño. Allí sigue en marcha el proceso.

20 de noviembre de 2008 . Fernando Carballo, intendente de Magdalena, anuncia un "pronto acuerdo" con Shell.

Marzo de 2009 . Shell ofrece una compensación de US$ 9,5 millones, sin reconocer responsabilidades. El trato queda sujeto a un plebiscito no vinculante.

17 de mayo de 2009 . Los vecinos votan en el plebiscito. El 77 por ciento de los votantes acepta la propuesta de la petrolera.

Testimonios / Antonio Maldonado, pescador
"Esto era el paraíso"
Antonio Maldonado tiene 59 años y va a pescar a la ribera del Río de la Plata, en esta ciudad, desde los siete. Bueno, ya no va tanto porque no se puede: no hay tantos peces como antes. Pero va todos los días, sólo a mirar el río. Ayer hacía mucho frío y el cielo gris se había fundido con el agua. Pero él fue igual, con sus dos nietas, sólo a mirar el río.
"Esto era un paraíso de la pesca. El piso estaba repleto de almejas. Si entrabas sin zapatillas, te cortabas los pies. Ahora no hay almejas y tampoco peces", contó.
Antes de ir a la ribera, Maldonado fue a votar. No cree que el dinero que ofrece Shell alcance para reparar los daños provocados por el derrame de hidrocarburos ocurrido cuando chocaron, frente a la costa de Magdalena, el buque Sea Paraná, de bandera alemana, y el barco Estrella Pampeana, de esa petrolera. Sin embargo, votó por el sí al acuerdo entre la empresa y la municipalidad.
"­Voté por el sí porque, si no, esto se va a estirar mucho más. Ojalá transformen los US$ 9,5 millones en obras", dijo.

Testimonios / Horacio Pucheta, ex junquero
"Espero un arreglo"
Horacio Pucheta, de 56 años, tomó un puñado de juncos, que no debían medir más de 80 cm de alto, y los arrancó. "¿Ves? Un junco así no sirve -dijo-. Tiene que ser grueso y tener 1,80 m, por lo menos."
Pucheta votó por el no al acuerdo entre la Municipalidad y Shell. Sostuvo que los US$ 9,5 millones que ofrece la petrolera no son suficientes para subsanar los daños provocados por el derrame. Hasta el 15 de enero de 1999, cuando éste se produjo, Pucheta había sido junquero. Los 5.300.000 litros de hidrocarburo arruinaron su negocio.
Y hubo otras consecuencias. "Una de mis hijas tiene manchas en las piernas. Mi señora, problemas de hígado... A mí el metabolismo me cambió", dijo, y contó que uno de sus hijos, Luis, se suicidó de un tiro en la cabeza. "El cortaba junco, pescaba, cazaba. En ese momento Shell les pagó US$ 13.000 a muchos. A él no lo arreglaron. Se deprimió y se mató. Tenía 20 años. Nosotros ahora esperamos el arreglo económico", dijo Pucheta, que trabaja como remisero.