Un total de 65 llamadas se recibieron ayer desde primera hora de la madrugada en la guardia de Defensa Civil de Comodoro Rivadavia, por los destrozos que provocó el temporal de viento que azotó a la región.
Los principales pedidos de auxilio fueron por voladura de techos, vehículos destrozados por piedra o árboles caídos, aunque también hubo numerosos casos de carteles de comercios que cayeron. En ninguno de los casos hubo que lamentar personas heridas.
Uno de los pedidos de auxilio más urgentes fue el que se registró a las 4 en la calle 12 de Octubre al 3.380, donde integrantes de la familia Cárcamo sufrieron la voladura del techo de la cocina y parte del living, lo que demandó un agitado operativo para contener a los damnificados.
Por suerte, la situación no pasó a mayores ya que las chapas del techo en las habitaciones resistieron la embestida del viento y permanecieron en su lugar, lo que permitió que los Cárcamo quedaran al reparo hasta que lograron ubicarse en otras casas de familiares y amigos.
En total desde la guardia de Defensa Civil se recepcionaron unas 60 llamadas, de las cuales las más significativas fueron un auto destrozado por una rama de un árbol en el patio de una casa en Alsina y Sarmiento, voladuras de techo en galpones ubicados en diferentes barrios de la ciudad y parabrisas rotos en numerosos vehículos.
Un dato que llamó la atención, señalaron fuentes consultadas, es que cada vez que se produce un incidente con postes del cableado de teléfono, tanto desde Defensa Civil como otras entidades de seguridad se solicita la presencia de operarios de Telefónica y éstos nunca aparecen para brindar soluciones, a diferencia de la Sociedad Cooperativa Popular Limitada que de inmediato manda una camioneta con personal.
En ese contexto las máximas autoridades de Defensa Civil aclararon: “nosotros no tenemos una grúa o un camión carrozado con herramientas para ese tipo de intervenciones, por lo que se pide colaboración a las empresas o instituciones que son los responsables de los cableados y la respuesta en diferente de una firma a otra”.
Agregaron: “hay ocasiones en la que postes de envergadura se están por caer arriba de viviendas o vehículos y se necesita un equipo de operarios especializados en ese tipo de incidentes y, principalmente, que se acerquen con la maquinaria que se utiliza en esos casos”.
Si bien los casos contabilizados desde ayer a la madrugada superaron las 65 intervenciones, afortunadamente en ninguno hubo que lamentar víctimas. Para hoy se espera que merme la intensidad de las ráfagas, ya que el pronóstico refleja viento regular para toda la jornada.