A 21 mil 500 ascienden las personas aisladas por la inundaciones en el sur de Australia, mientras dos fallecieron y miles fueron evacuados de las áreas afectadas, amenazadas hoy además por gigantescas olas.
El estado de Queensland se sumó al de Nuevo Gales del Sur (NGS) al declarar zonas catastróficas, donde las torrenciales lluvias amainaron, pero encaran el reto de olas de unos 10 metros de altura en las estribaciones costeras.
Las autoridades instaron a los moradores de esas áreas a abandonar sus hogares y a extremar las precauciones.
Intempestivas tormentas azotan la costa este del país y se espera causen mas estragos el fin de semana, sobre todo en el norte de NGS y en el sureste de Queensland, batidos por vientos de hasta 100 kilómetros por hora.
Las escenas de cientos de árboles caídos, casas y autos anegados, cables por tierra reeditan las riadas ocurridas en febrero anterior, cuando la propia región fue afectada en más de un millón de kilómetros cuadrados, murió una menor y tres mil casas quedaron destruidas.