Más de 80 personas permanecen evacuadas en Neuquén, Plottier y Senillosa a raíz de la crecida del río Limay, cuyas aguas voltearon ayer una defensa en China Muerta e inundó 18 viviendas. Sólo en ese sitio 52 personas abandonaron sus casas y se alojaron en sitios de familiares y amigos. Hay familias que quedaron aisladas y se comunican con la costa en canoa.
Las erogaciones hacia los valles comenzaron a realizarse la semana pasada para liberar los embalses, de manera de que estén preparados para absorber las precipitaciones en las montañas.
Hay decenas de casas que corren serio riesgo de ser alcanzadas por el agua en las próximas horas pues está previsto que se mantenga el nivel de erogaciones.
"La información que manejamos es que el Limay tiene un caudal promedio de 1.400 metros cúbicos por segundo pero cuando vamos a ver los pobladores ribereños nos dicen que de noche sube mucho", admitió ayer el director provincial de Defensa Civil Claudio Domínguez.
Lo que ocurre es que el nivel informado es el promedio diario y por la noche las erogaciones pueden crecer por despacho eléctrico. A las 30 personas que ya habían abandonado sus viviendas hasta ayer, se sumaron ahora los integrantes de 18 familias de la Isla 119, en el paraje China Muerta. Diez personas decidieron quedarse aunque se cortó la comunicación terrestre.
En islas aledañas se autoevacuaron otras nueve personas. En total, en la zona hay 29 viviendas afectadas.
Por la mañana, durante una recorrida de este diario se pudo observar que en el balneario La Herradura el agua está a 30 centímetros de las casas que conforman un barrio residencial. Los vecinos aseguran que sólo en 2001 el río llegó a estos niveles.
Allí, personal de Defensa Civil, Vialidad y del municipio de Plottier han trabajado en la elevación de las defensas en la zona de La Herradura.
La mayoría de los vecinos decidió autoevacuarse debido al avance de las aguas.