A tono con lo que ocurre en el resto del país por la sequía y la falta de incentivo para el sector, en este distrito se registró un retroceso en el stock ganadero de 10 mil vacunos en el término de un año.
Esto se desprende de las estadísticas de la primera campaña de vacunación antiaftosa y brucelosis, donde se verificó una merma de 10.493 ejemplares, resultando la caída mayor en la categoría vacas con 6.370 cabezas menos que en 2008.
Este año se vacunaron 172.141 animales en 759 establecimientos productivos del distrito, siendo 74.816 vacas; 4.723 toros; 11.636 novillos; 3.601 novillitos; 29.385 terneros; 30.791 terneras, y 17.189 vaquillonas.
El responsable de la Fundación para la Sanidad Ganadera local, José Luis Iribarne, reconoció que se constató una merma en los animales de todas las categorías, pero hizo referencia al descenso en las vacas.
Explicó que "nunca tuvimos una reducción total de casi 11 mil animales", y recordó que se han comprobado reducciones de 4.000 a 5.000 animales desde 2004 a la fecha.
"En la primera campaña de 2004 teníamos 204 mil animales y ahora estamos en los 172.141", acotó.
Manifestó que ahora se registró un incremento de 1.526 novillos (11.636 en 2009 frente a los 10.110 de 2008) y de 1.456 vaquillonas (17.189 en 2009 contra las 15.733 de 2008).

Venta de ganado
La sequía motivó que se aumentara la venta de hacienda, pero la mayoría presentaba un estado regular, en tanto que los índices de preñez son muy variables y responden linealmente a la condición corporal lograda a la salida del invierno anterior.
Aquellas explotaciones de inferior calidad y con deficiente manejo tuvieron 45-50% de preñez, aunque quienes adoptaron algunas medidas correctivas en primavera lograron 65-70%.
Sin embargo, se alcanzó un 92 al 95% de preñez en los campos que fueron bien manejados.

Grave situación
Mientras tanto, en el último informe del RIAP del INTA Balcarce se calificó como "grave" a la realidad ganadera de la región, al tiempo que se puso de relieve la "intensidad, severidad y extensión" de la sequía.
Se consignó que los campos naturales y pasturas permanentes están prácticamente arrasados, para recordarse que los verdeos de verano rindieron pocas raciones y los diferidos están pobres.
Las pasturas nuevas y verdeos de invierno se encuentran seriamente afectados, se acotó.
En la zona de Necochea y Lobería se agotaron los escasos rollos que se confeccionaron en primavera, estando en venta rollos de cola de trigo, de cebada y de soja a 70-80-90 pesos en origen.
El informe detalló que es escasa la existencia de maíz porque la cosecha regional fue muy pobre, y quien dispone este cereal lo contempla utilizar o especula con comercializarlo a un precio elevado. Un cuadro parecido se da con la cebada cervecera.