El Ente Provincial de Energía del Neuquén (EPEN) pretende reactivar sus pequeñas centrales hidroeléctricas, que actualmente están fuera de servicio, y construir más, ante las nuevas condiciones del mercado y la legislación que fomenta este tipo de iniciativas.
Para ello, se puede recurrir a financiamiento por medio de los Mecanismos de Desarrollo Limpio (MDL) siempre que esa generación reemplace a la de origen térmico en el Mercado Eléctrico Mayorista (MEM).
El EPEN y la Secretaría de Estado de Recursos Naturales de la provincia firmaron un acuerdo para la elaboración de una convocatoria a interesados en invertir en la puesta en marcha de las centrales hidráulicas existentes y la construcción de nuevas centrales.
Los términos para el llamado a inversores ya están redactados. Se convocará a empresas que pretendan realizar la reparación, puesta en funcionamiento, operación y mantenimiento de las cinco centrales hidroeléctricas existentes y la construcción de ocho nuevas.

Llamado
La convocatoria también contempla la construcción de las obras civiles necesarias; el desmontaje, reparación y montaje del equipamiento hidromecánico y electromecánico; la provisión de materiales y construcción de líneas de transmisión; la operación, mantenimiento y explotación de las centrales, y la apertura de caminos de accesos a las obras.
Las centrales de mayor magnitud y que están en proceso de relevamiento para su rehabilitación son la de San Martín de los Andes, de 400 kW; Aluminé, de 340 kW, y Butaco (en el arroyo homónimo, entre Buta Ranquil y Barrancas), de 280 kW.
Lo mismo sucede con la de El Manzano (Huinganco), de 200 kW; y La Fragua, de 130.
En cuanto a las nuevas, se espera poder construir las centrales Aluminé 2, de 3.500 kW; Arroyo Catarata (Villa Traful-Villa La Angostura), de 2.700 kW; Nahueve, de 4.000 kW; San Martín I, de 3.000 kW; y San Martín II (sólo si no se hace San Martín I), de 2.000 kW, Las Coloradas y Ruca Choroi. La más importante de ellas es la que se prevé ubicar en Nahueve, por la capacidad operativa.