La próxima semana se iniciará la construcción de la segunda cloaca máxima que aliviará al sistema virtualmente colapsado de la ciudad.
La primera etapa de la obra, que abarca un tramo de mil metros de cañería, demandará una inversión de ocho millones de pesos que serán aportados por el gobierno provincial, con un plazo de ejecución de seis meses.
Los caños de 800 mm que se utilizarán para la nueva colectora ya están acopiados en el predio de la planta de tratamiento de efluentes.
Para la segunda etapa se buscaría que la Nación sea la que otorgue el financiamiento y para la tercera se estudia hacer un “mix” entre la Municipalidad, el gobierno provincial y la Nación. La nueva cloaca máxima contempla también la construcción de dos nuevos módulos de lagunas de tratamiento en la planta de la Administración Municipal de Obras Sanitarias.
Esta obra traerá alivio a la situación que se vive en diversos sectores de la ciudad cuando se produce el colapso del sistema a raíz de las lluvias y la elevación de la napa freática, que impide el normal escurrimiento en una zona donde el sistema de desagües cumple la doble función de transportar los efluentes cloacales y las aguas pluviales.
La primera etapa abarca aproximadamente mil metros de cañerías, comenzando en proximidades a la antigua planta de Amos, con un trazado paralelo al de la cloaca máxima ya existente.
La nueva colectora no cruzará campos privados, sino que irá por los caminos públicos para que no se produzcan conflictos como el que sucedió con la familia Oddone.
Esta última recurrió a la Justicia en la búsqueda de una indemnización por los daños ocasionados por personal municipal que entró sin autorización al campo para destapar un tramo de la cloaca máxima.
El hecho de contar con una segunda colectora permitirá garantizar el servicio para una población de casi el doble de la que actualmente posee San Francisco.
La Municipalidad de San Francisco está avanzando en obras menores, pero de sustancial importancia para ayudar a descomprimir al colapsado sistema cloacal, entre las que se pueden mencionar, la rectificación de la traza del colector de calle Ecuador, desde Lamadrid hasta Trigueros de Godoy, el colector de avenida Cervantes, lo que evitará hacia fin de año los clásicos desbordes de la zona.