Son 3.150 millones de pesos para las tareas de saneamiento, reducción de la contaminación ambiental, ordenamiento del territorio de la cuenca y fortalecimiento institucional.
Es plata fresca para llevar adelante el saneamiento del Riachuelo cuyo beneficio puede llegar a la cuenca y a las 5 millones de personas que lo habitan. La incorporación de un nuevo préstamo produce incógnitas que el tiempo resolverá. Es mucho dinero es mucha deuda. Hasta el momento el tema se dirime en cuestiones básicas incumplidas o cumplidas parcialmente. Lo cierto es que para la ejecución del préstamo se necesita poder político algo que a Bibiloni le es ajeno y no por su voluntad. Su paciente trabajo para volver a la cartera de gobierno comenzó a poco de irse de la gestión de Picolotti. A los tres meses ya pensaba en ser secretario. Sin embargo, la voluntad alcanza para construir pero hay frenos. Alguien que recorre los pasillos de la Secretaria de Ambiente nacional comentaba “los peores enemigos están en el gobierno”. Y este canto comenzó a días de haber asumido.
El préstamo en cuestión lo llevará en la “práctica” la Secretaría de Ambiente de la Nación y la empresa Agua y Saneamientos Argentinos (AySA). La práctica es algo licuado por la realidad. El mismo Bibiloni en la reunión de la Defensoría con el Cuerpo Colegiado, nombro a De Vido en varias oportunidades –no menos de diez-. Caminar la cuerda en la altura del circo y arriba de una bicicleta no es para cualquiera. Mucho menos cuando de ambos lados de la cuerda hay gente que la mueve. Esto contrasta con la grandilocuencia de las declaraciones ofrecidas al diario oficialista Página 12. Allí Bibiloni dijo que es “un gesto que fortalece un proceso irreversible para resolver los problemas estructurales de la cuenca de una vez y para siempre”. A confesión relevo de prueba. ¿Fortalecer lo irreversible o resolver?.
A su vez la mayor parte del crédito se aplicará para la construcción de la red cloacal y plantas de tratamiento. Esto último es parte de la discusión entre los técnicos del Banco, Aysa, y la cartera ambiental nacional.
El talón de Aquiles de la obra está presente en varios aspectos. Los mismos pueden resumirse en plantas de tratamiento insuficientes, que a los caños van a ir a parar todo y que el emisor supone llevar la contaminación al río. O sea extender la mancha costera. Según Bibiloni, el financiamiento “significa que el país cuenta con credibilidad a nivel internacional”.
El Riachuelo tiene en su haber un préstamo de 250 millones de dólares del Bid en la época de María Julia Alsogaray. Ayer el Secretario General de la Asociación del Personal de los Organismos de Control, Hugo Ernesto Quintana dijo que “para limpiar el Riachuelo no se necesita más dinero y si decisión política”. Recordó que de esos 250 millones, 150 fueron reasignados a planes sociales y de los restantes apenas se ejecutaron 38 millones y se pagó 9 en conceptos de multas por no utilizar el dinero. A su vez criticó la sub-ejecución presupuestaria.