El derrame accidental de un piletón con dos mil litros de creosota líquida "pudo ser controlado y no causa ningún tipo de riesgo para la población", aseguró ayer el secretario de Aguas y Medio Ambiente, Sergio Lingiardi.
El accidente se produjo dentro del predio donde funciona la planta de tratamientos de efluentes cloacales, cuando el elemento era trasladado desde el ex establecimiento de impregnación de durmientes, donde ahora se levantará un barrio de viviendas.
"Tras el movimiento de suelo para la construcción de viviendas se detectó la existencia de creosota, y se decidió trasladar el elemento hacia la planta de cloacas", explicó Lingiardi.
"Dentro de este predio, el piletón volcó y se derramó el líquido", añadió el funcionario. El accidente trascendió luego que los vecinos de toda la ciudad se quejaran por un penetrante olor. Fue entonces cuando apuntaron a los trabajos que se realizaban en esa planta.
"Ese olor, parecido al del amoníaco, no tiene nada que ver con la creosota y todavía no sabemos de donde proviene. Estamos seguros de que el derrame que se produjo no presenta riesgo para la población", apuntó el secretario de Aguas y Medio Ambiente.
La planta de impregnación de durmientes funcionó hasta 1991 en un predio ubicado en el extremo oeste de la ciudad. En ese mismo lugar, y en otros terrenos cercanos, ya se licitó la construcción de 166 viviendas para erradicar los barrios carecientes Luján y Evita.