“Tenemos agua”, una frase sencilla, pero con un sentimiento profundo y una expresión de algarabía contenida por décadas por todo un pueblo; transformó un acto protocolar en una ceremonia embargada de emoción cuando el gobernador de la Provincia, Gerardo Zamora, dejó formalmente inaugurado el acueducto Frías - Choya.
Zamora llegó a la localidad de Choya pasadas las 8.40 de ayer, y lo hizo sin el ministro De Vido, quien en ese momento estaba abordando el vuelo hacia Santiago del Estero. En el lugar, y junto al secretario del Agua, Abel Tévez, dejó inaugurado el acueducto y sus obras complementarias, como la oficina de la Diosse y 400 conexiones domiciliarias, incluso llegó a beber agua en una casa de familia, como símbolo del avance logrado. El profesor Carlos Harón le entregó al gobernador un sobre que contenía fotografías históricas de la década del 40, en donde se reflejaba cuando los pobladores de Choya robaban agua de los trenes. Y el regalo era una forma de expresar un sentimiento del pueblo sufrido por la falta del vital líquido elemento. En tanto, el vecino Marcelo Carabajal junto a vecinos elaboró un pergamino en el que expresa: “Gracias gobernador por hacer realidad este sueño centenario” y al entregarlo le dijo que “muchos vivimos hoy esta fiesta con lágrimas en los ojos por la emoción. Mis padres murieron sin poder ver esta realidad”, afirmó. A esto se sumó otra vecina de Choya, Rita Ellan, quien resaltó que “hoy es un día de gloria porque tenemos agua. Desde hace muchos años sólo conocíamos promesas que resultaban falsas y hoy gracias al gobernador Zamora, por fin llegó el agua y por eso no tenemos palabras para agradecerlo”. Por su parte, el gobernador, al hacer uso de la palabra, dijo que el acueducto no terminará en Choya, sino que se extendería a San Pedro de Choya, Estación La Punta y Villa La Punta.
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