Hay varias localidades con problemas en el suministro. Pero la ciudad bahiense es la más afectada. Padece restricciones en el consumo y utilización. Y se teme que para fin de año
Los problemas con el servicio de agua acechan a las localidades de la provincia de Buenos Aires. La zona más afectada es Bahía Blanca que, con 284.776 habitantes -según el último censo realizado en 2001-, se encuentra en "alerta amarilla", y no se descarta que la situación se agrave. Por eso, desde el Concejo Deliberante, por pedido de los propios vecinos, se pidió al Municipio conducido por Cristian Breiteinstein (FpV) que declare la "emergencia hídrica".
Aloma Sartor, presidente del bloque de la UCR del Concejo Deliberante de Bahía Blanca, indicó a diariohoy.net que "se pidió la declaración de la emergencia hídrica, ya que para noviembre se espera ingresar en 'alerta roja'. Ya hay varios puntos de la ciudad que se quedan sin agua. Hubo restricciones y baja presión aunque desde ABSA (Aguas Bonaerenses, concesionaria del servicio en la localidad bahiense) lo niegan”.
En plena campaña electoral (sólo faltan cinco días para votar en las legislativas) la presidenta Cristina Fernández visitó en dos oportunidades Bahía Blanca y, por supuesto, anunció obras para recuperar el servicio de agua potable. Se anunció la firma de un convenio entre los gobiernos nacional, bonaerense y bahiense para la inversión de 40 millones de pesos, destinados a la realización de diversas obras de infraestructura.
El jefe comunal indicó que el dinero será utilizado en el desarrollo de obras para recuperar el abastecimiento de agua potable en la ciudad. Y agregó que "se firmó el compromiso de financiamiento de obras que fueron requeridas por ABSA". Por ejemplo, seis perforaciones del Bajo San José y nueve pozos más, con sus respectivos estudios geoeléctrico. No obstante, existen dudas acerca de los anuncios ya que se dieron en el marco de la campaña electoral que lleva a cabo el Frente Justicialista para la Victoria.
La delicada situación del suministro en Bahía llevó a aplicar restricciones en el consumo y uso del líquido vital en la mencionada ciudad y Punta Alta. Este período de escasez tiene su punto de partida en la insuficiencia de las lluvias de los últimos años, que ha colocado en un nivel crítico al dique Paso de las Piedras, desde donde se abastece a casi 400 mil personas.
Pero el problema que hoy condena a miles de familias bahienses no surgió de la noche a la mañana sino que desde hace años se pidió al Gobierno provincial y nacional la construcción de un segundo acueducto desde Paso de las Piedras, a efectos de cubrir eventuales inconvenientes en el único que provee a las dos ciudades.
Sin embargo, todo no ha pasado del terreno de las meras expresiones de deseo y proyectos sin aprobación -que según los bahienses también presentaron a ABSA-. Mientras la cantidad de habitantes fue creciendo y, con ello, las necesidades de un servicio más amplio, en Bahía Blanca aún esperan por soluciones.
Bahía no es el única localidad con problemas en el servicio de agua corriente. Según pudo constatar diariohoy.net en Carlos Casares, Pehuajó, Florencio Varela y Nueve de Julio aún persisten denuncias por la "contaminación del agua con arsénico", y las fuertes subas servicio.