El Gobierno modificó la distribución de los fondos del presupuesto 2009 a través de una decisión administrativa que lleva la firma del jefe de Gabinete, Sergio Massa, y el ministro de Economía, Carlos Fernández. La norma, publicada ayer en el Boletín Oficial, redundó en un aumento del presupuesto para la Presidencia de la Nación, el Ministerio de Planificación Federal y el de Desarrollo Social, con el aporte de fondos del Tesoro por $ 525,4 millones.
Los recursos adicionales se destinarán, entre otros fines, a financiar empresas de transporte público y el déficit de caja de Aerolíneas Argentinas, transferencias de fondos para municipios y ayudas sociales. Esos fondos se retirarán, entre otros orígenes, de los créditos presupuestarios previstos para Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT) y Aguas y Saneamiento Argentinos (AySA).
La mayor tajada de ese dinero se destinó a las arcas del ministro de Planificación Federal, Julio De Vido. El aumento presupuestario se destinará al financiamiento de gastos vinculados a obras públicas, gastos corrientes de Aerolíneas Argentinas ($ 97,7 millones) y de empresas privadas del sector automotor (175 millones), entre otros fines.
El Ministerio de Planificación reacomodó también algunas partidas de su propio presupuesto, que no generaron una modificación en los créditos disponibles para esa cartera.
Los recursos adicionales que recibirá Presidencia de la Nación suman $ 10,8 millones y serán destinados al pago de salarios, contratos y ayudas sociales, entre otros usos.
El Ministerio de Desarrollo Social, a cargo de Alicia Kirchner, recibió $ 120 millones adicionales, que serán transferidos a los municipios para gastos de capital, según consta en las planillas anexas a la decisión administrativa 426/2009, publicada ayer.
Las modificaciones presupuestarias son una práctica común desde que Néstor Kirchner llegó al poder en 2003. El uso de este instrumento le permite al Gobierno modificar el presupuesto sin tener que pasar por el Congreso gracias a la vigencia de los llamados superpoderes. Esas facultades, que durante años estuvieron asociadas a la figura de Alberto Fernández, recaen ahora en Massa.
Es probable que este año la Casa Rosada no amplíe el presupuesto como lo hizo antes, dada la actual crisis económica. Ocurre que la recaudación se ubicará probablemente por debajo de la meta plasmada en el presupuesto. Los años anteriores la meta se superaba y los recursos adicionales eran asignados libremente por el Gobierno a través de un decreto.