El mandatario fue consultado sobre el acuerdo con Brasil cuando entregó una copia del mismo en el Congreso. El acuerdo firmado por los presidentes Lula Da Silva y Fernando Lugo debe ser aprobado por el Legislativo.
“(El acuerdo) no puede ser considerado una migaja porque todavía no conseguimos nada. Moralmente y jurídicamente es un paso importante”, dijo el mandatario. Agregó más tarde que “desde el punto de vista de la dignidad no se puede cuantificar, ni medir en números, pero sí iniciar una etapa respetuosa, de igual a igual” con el país vecino ya que el Paraguay anteriormente dependía de las potencias de la zona como Brasil y Argentina.