Alrededor de un millón de habitantes de los sureños estados indios de Andhra Pradesh y Karnataka se encuentran hoy desplazados de sus hogares por las inundaciones provocadas por las lluvias monzónicas que azotan la región.
Según los reportes, al menos 150 personas han fallecido arrastradas por las aguas o por el derrumbe de sus hogares.
La cifra exacta de muertos sólo se conocerá, sin embargo, cuando cesen las lluvias y el agua se retire de los centenares de aldeas que aún permanecen inundadas.
El comisionado Dinesh Kumar, de la división de atención a desastres del Ministerio indio del Interior, aseguró que las operaciones de rescate y el envío de ayuda para los damnificados continúan en ambos estados. Tan sólo en Andhra Pradesh, se han establecido 89 campamentos para acomodar a cerca de 400 mil personas procedentes de 272 aldeas afectadas.
En Karnataka se establecieron otros 583 centros que brindan refugio a unos 165 mil desplazados.
Las inundaciones también han destruido las cosechas, la infraestructura civil y las vías de comunicación por ferrocarril y carretera, lo que hace aún más difícil brindar atención a los damnificados.
El Ejercito, la Marina y la Fuerza Aérea de la India participan junto con las autoridades estaduales en las labores de rescate y salvamento.