Alrededor de 3 mil 800 familias del recién creado fraccionamiento Villas del Campo reciben desde hace dos semanas agua contaminada, lo que ha ocasionado brotes de diarrea, salmonelosis y dermatitis, sobre rodo entre los niños.
Unos 300 colonos ocuparon hoy las oficinas de la inmobiliaria Urbi, a cuyos representantes exigieron agua limpia y pagar el costo de los servicios médicos de 94 personas afectadas.
Explicaron que, desde hace un mes, por las redes primarias de distribución de agua potable comenzó a salir “un líquido amarillento y espumoso de olor fétido”, situación que se agudizó hace dos semanas.
Los dirigentes vecinales Jorge Barrera y Enrique Sanagustín aseguraron que Urbi suministra “agua tratada para riego” en las principales redes de distribución que surten a las 3 mil 800 viviendas del conjunto.
“Tenemos en promedio un año de haber ocupado nuestras casas. Al principio, cuando compramos, nos dijeron que íbamos a tener pozos propios, pero no es así”, señaló Sanagustín.
Personal de la Comisión de Aguas del Estado de México y de Urbi prometieron resolver el problema en dos días.
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