Desde el inicio del mes, el río Paraná mantuvo su firme tendencia de crecimiento.
En la última semana, su altura frente al Puerto Nuevo subió 22 centímetros. Y en casi tres semanas, el ascenso fue de poco menos de un metro: pasó de 2,53 metros el 16 de setiembre, a 3,35 metros, la altura registrada ayer por Prefectura Naval Paraná.
Según el último informe elaborado por el Instituto Nacional del Agua (INA), el río frente a la costa local mantendrá esa tendencia en los próximos días. Se prevé para mediados de la venidera semana, un incremento de 10 centímetros en su caudal.
Lejos todavía del nivel de alerta –en 4,50 metros–, su altura tenderá a estabilizarse por encima de los niveles medios mensuales de los últimos 25 años, apunta el pronóstico.
Sin embargo, el INA había advertido semanas atrás la posibilidad de una crecida importante en las aguas del río Paraná y sus adyacentes para enero y febrero, mayor a la que se produjo en 2007.

Escasez. Con el mayor caudal de agua en el curso del río, pescadores ya alertaron por las dificultades para realizar su trabajo. Así, ante esta situación hídrica la pesca es escasa y sólo se pueden captar algunos armados.