Tras largas horas de constantes precipitaciones, la principal planta potabilizadora del estado Barinas ha restringido su funcionamiento afectando a 60% de la población, que es abastecida en la parte alta de la ciudad capital.
Sin un informe de la empresa Hidroandes, a través del cual se explique la situación de la inesperada suspensión, al parecer las últimas causas que han obligado a la paralización de la planta han sido las crecidas del río Santo Domingo y el arrastre de sedimentación. Esta vez, se presume que se haya presentado la misma situación por precipitaciones reportadas durante la última sermana en la zona andina del territorio nacional. El viernes, día cuando llovió en Barinas por nueve horas aproximadamente, se procedió a la suspensión del servicio de agua potable hasta la madrugada del sábado cuando volvieron a cargar las tuberías. Ayer fue un día de sequía en la mayoría de los hogares. No es descartable que Hidroandes haya procedido con algún plan de mantenimiento en la planta, pero hasta ahora no han emitido explicaciones ni tampoco anunciaron a las comunidades afectadas la suspensión. El número de barriadas y urbanizaciones que este fin de semana han quedado sin agua potable no es manejado con exactitud por las autoridades de la hidrológica, pero sólo en los alrededores de la potabilizadora hay más de 40. Otro de los casos que pudieran estar afectando a la mayoría de los vecinos es el uso indiscriminado de bombas de succión en los hogares, que en la actualidad no cuentan con un plan que regule la instalación de éstas, y a su vez imposibilita la administración efectiva del vital líquido. Cabe destacar que entre los daños de las precipitaciones que obligan a suspender el funcionamiento de la planta está en la capacidad de tolerancia de turbidez es de tres mil unidades, y en cada crecida del río sobrepasa las 12 mil unidades. Durante las lluvias del mes pasado, que produjeron derrumbes entre Barinas y Mérida, el nivel aumentó a 68 mil unidades en promedio. Por esta situación, residentes del casco central de Barinas se han mostrado molestos con los representantes de la empresa Hidroandes. "Nosotros estamos claros en que las lluvias en mucho casos dañan los motores de las plantas potabilizadoras, pero es una irresponsabilidad de Hidroandes, quitarnos el servicio sin ningún aviso, para poder tomar las previsiones", dijo Juan Ernesto Silva en representación de una comunidad en Barinas.