Ante la proximidad de un nuevo tifón, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y el gobierno de Filipinas han acelerado la operación de asistencia humanitaria a la población damnificada por las inundaciones y aludes masivos en la isla de Luzon, en el norte del archipiélago.
Según los meteorólogos, el tifón Lupit podría llegar a Luzon –que aún sufre los daños de dos tormentas – el jueves, lo que complicaría la distribución de ayuda y podría aumentar el número de siniestrados.
Por el momento, el PMA, en conjunto con otros organismos humanitarios, ha desplegado un operativo de emergencia para repartir 26.000 toneladas de víveres durante los próximos tres meses a los afectados en las diferentes islas.
Con este objetivo, la agencia ha conseguido helicópteros y botes para llevar la ayuda a los necesitados que se encuentren aislados por las inundaciones o en zonas remotas de difícil acceso.
El PMA informó que el flujo de asistencia a Luzon se mantendrá mientras las condiciones meteorológicas lo permitan.