La construcción del colector ribereño cloacal La Florida y Rambla Catalunya está parada desde hace 15 días. Así lo confirmó el presidente de Obring SA — firma que lleva adelante las obras—, Franco Gangliardo, al afirmar que la deuda de Aguas Santafesinas SA (Assa) supera los 2,5 millones de pesos, situación que incluso los obligó a suspender a 70 obreros.
Por su parte, el gerente de Relaciones Institucionales de Assa, Guillermo Lanfranco, admitió que “se modificó el ritmo de obra hasta que el Ejecutivo remita los fondos para cancelar los certificados pendientes”. La obra, que comenzó en abril y prevé una inversión de 4,6 millones de pesos, incluye dos mil metros de cañería que interceptarán siete conductos pluviales de la zona.
Pero desde hace dos semanas los trabajos se frenaron. Si bien el titular de Relaciones Institucionales de Assa afirmó que “ya está el compromiso del Ejecutivo provincial de remitir los fondos necesarios para continuar”, reconoció que existe “una deuda”.
Por su parte, el intendente Miguel Lifschitz dijo que “el ministro de Hacienda provincial (Angel Sciara) garantizó que las obras van a tener continuidad porque es un compromiso de la provincia con la ciudad”.

Sin respuesta. Sin embargo, un panorama mucho más desalentador presentó el presidente de Obring. “Desde mayo no pagan los certificados de trabajos que ya fueron ejecutados. Y lo peor es que los directivos de Assa tampoco dan una respuesta sobre cuándo se van a efectuar esos pagos porque son fondos que tienen que llegar desde la provincia”, sostuvo Gangliardo, al tiempo que detalló que la deuda “es de más de 2,5 millones de pesos”.
Ante esa situación y con el 65 por ciento de la obra ejecutada, la empresa avanzó en la suspensión de 70 trabajadores.
“De no haber respuesta, se va a tener que proceder al despido y en el peor de los casos a la rescisión del contrato por falta de pago”, advirtió.