Ayer, el director de la EEGB 892, Eduardo Florencio Torres, formuló un dramático pedido de agua a las autoridades. La escuela está ubicada en el paraje San Antonio, departamento Almirante Brown, donde en reunión de docentes, padres y alumnos resolvieron labrar un acta en la que consta que desde el 23 de octubre y “hasta nuevo aviso” se suspenden las clases. Esta decisión —señala el acta— obedece a que las cisternas que acumulan agua están totalmente vacías. Se dispone el cierre porque sin el vital elemento “es imposible desarrollar normalmente las actividades escolares”.
Escuela albergue
Este establecimiento funciona como escuela-albergue, y esto implica preparar los alimentos para el desayuno, almuerzo, merienda y cena, además de la necesidad de higienizarse que tienen el docente, los siete alumnos albergados, la madre de uno de los chicos y la cocinera.
Hasta que llueva o lleven agua
El acta de cierre de la escuela dice que el regreso a clase se producirá “a partir del momento cuando tengamos agua disponible en el establecimiento. Esto puede darse por la caída de lluvias o cuando se responda la solicitud de abastecimiento de agua que se realizó por nota 61/2009 del 7/10/2009, por vía jerárquica, como se ha requerido para este tipo de necesidades y de la que hasta el momento no se ha tenido respuesta.
El acta está firmada por el director Eduardo Torres, Javier Salvatierra, Nelcy Pérez, Silvia Sendra, Antonio Pintos y Pablo Pérez. |
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