Corrientes ingresó en alerta hídrica hace dos días, cuando el hidrómetro superó los 6,50 metros. El director de Defensa Civil de la Municipalidad capitalina, Bruno Lovinson, afirmó que la totalidad de los evacuados fueron reubicados y están siendo asistidos con alimentos y sanitariamente.
Los damnificados son habitantes de la zona ribereña de 17 barrios de la ciudad capital y no se descarta que se incrementen, de acuerdo a las lluvias de los próximos meses, que repercutirán en el crecimiento del Paraná.
El director de Defensa Civil detalló que la asistencia de los afectados es total y que los barrios con más evacuados son los más populosos de la zona costera, como Costa Esperanza, Río Paraná y Punta Taitalo, entre otros.
Además, las extensas playas de la costanera correntina también se ven tapadas por las aguas.
En Chaco, en tanto, la cantidad de personas autoevacuadas también se cuentan por cientos, aunque no existen registros precisos. El gobierno provincial los asiste con la provisión de chapas de cartón (para que puedan erigir construcciones precarias donde pasar la noche), frazadas, colchones y botas de goma.
Según fuentes gubernamentales, el río llegaría a su pico previsto en los 6,75 o 6,80 metros y desde entonces ingresaría en una lenta curva descendente, aunque aclararon que está sujeto a que no se presenten nuevas lluvias en las altas cuencas.